El consumo abundante de hot dogs, chorizos, jamón, tocino y otras carnes procesadas incrementa el riesgo de morir antes, según un estudio publicado en la revista científica BMC Medicine.
Tras realizar una investigación entre más de un millón de personas de diez países europeos, el grupo de expertos halló una relación entre las dietas ricas en carnes procesadas y las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y las muertes tempranas.
Según los investigadores, la sal y las sustancias químicas que se emplean para conservar esos productos perjudican la salud.
CONCLUSIONES DE LA INVESTIGACIÓN El grupo de científicos observó cómo los porcentajes de muerte prematura aumentaron de acuerdo con la cantidad de carne procesada consumida.
Los expertos detectaron que la probabilidad de que las personas que ingirieron más de 160 gramos de carne procesada al día unas dos salchichas y una rodaja de tocino murieran en un plazo medio de 13 años fue un 44% mayor que la de aquellos que consumieron 20 gramos.
El informe reveló que una alta ingesta de ese tipo de carne elevó en un 72 % el riesgo de morir de una enfermedad coronaria y en un 11 % el riesgo de fallecer de cáncer.
La profesora Sabine Rohrmann, de la universidad de Zurich (Suiza), responsable de la investigación, estimó que “un 3 % de muertes prematuras anuales se podrían evitar si las personas comieran menos de 20 gramos de carne procesada al día”.
El Gobierno británico recomienda no tomar más de 70 gramos de carne procesada al día, lo que equivale aproximadamente a dos rodajas de tocino.