Consumir abundante comida chatarra y, en general, alimentos altos en grasas, no solo te hará subir de peso, también puede deteriorar tu cerebro al alterar la neurogénesis, proceso encargado de generar nuevas células nerviosas, según se confirmó tras más de una década de investigación. Sin embargo, ahora un estudio sugiere que el ingerir una dieta rica en omega-3, y especificamente aceite de pescado, puede ayudar a revertir este cuadro.
Investigadores de la Universidad de Liverpool encontraron que este ácido graso puede prevenir los mencionados efectos negativos al estimular el área del cerebro que controla la alimentación, el aprendizaje y la memoria. Para el estudio se analizaron múltiples trabajos realizados alrededor del mundo y se hicieron modelos con animales.
Inicialmente el equipo de científicos deseaba investigar el efecto del omega-3 en la reducción de peso, pero finalmente no encontraron evidencia que confirme esta relación.
Además del aceite de pescado, el salmón, las sardinas, las anchovetas, las semillas de chía, la linaza, entre otros, son ricos en omega-3.