Es esencial saber cómo detectar si un menor necesita lentes al iniciar su etapa escolar.
Es esencial saber cómo detectar si un menor necesita lentes al iniciar su etapa escolar.
Redacción EC

En marzo,, lo cual representa una tarea de suma importancia para la familia, pues tienen la labor de prepararlos para el inicio de un nuevo año académico. Los padres tienen la tarea de potenciar los factores que le permitirán a sus hijos dar el máximo esfuerzo durante su etapa escolar y uno de estos es una correcta visión, por lo que es esencial saber cómo detectar si un menor necesita lentes.

En esa línea, el Dr. Raúl Swayne, especialista de Oftálmica Clínica de la Visión, brinda algunos consejos para identificar si un niño necesita lentes desde temprana edad. “El porcentaje de errores refractivos en niños es alto y varía según cada país. En Perú, en un estudio realizado se encontró que la prevalencia es de 7.2 %, siendo los principales errores refractivos o problemas visuales la hipermetropía (visión borrosa de cerca) y el astigmatismo (visión distorsionada), seguidos de la miopía (falta de claridad al ver de lejos)”, indicó.

Consecuencias de no utilizar lentes de ser necesario

Según el experto, a medida que el niño va creciendo y usando gafas, estos errores en la visión pueden llegar a corregirse, causando que su medida disminuya. No obstante, de no utilizar lentes, se podría perder la oportunidad de desarrollar correctamente su visión. De esta manera, se podría llegar a un punto en el que ni siquiera las cirugías recuperen completamente la capacidad visual.

La hipermetropía y el astigmatismo se presentan al nacer, pero no pueden detectarse hasta que el niño comienza sus actividades con el entorno. Por supuesto que hay factores de riesgo durante el desarrollo de la vida, por ejemplo, si se sufre una lesión ocular o hay alguna enfermedad que curve la córnea, se puede ocasionar astigmatismo”, añade el Dr. Swayne.

Para evitar problemas visuales, lo recomendable es realizar revisiones en el nacimiento, a los seis meses, al primer año, y anualmente a partir de esa fecha.
Para evitar problemas visuales, lo recomendable es realizar revisiones en el nacimiento, a los seis meses, al primer año, y anualmente a partir de esa fecha.

Es preciso resaltar que el constante uso de pantallas electrónicas en la infancia también podrían resultar en problemas de visión, como es el caso de la miopía. “Al estar frente a una pantalla a una distancia corta por muchas horas, se desarrolla más la visión de distancia cercana. Entonces el niño está aprendiendo a ver solo de cerca, produciendo que los objetos lejanos se vean borrosos”, agregó el especialista de Oftálmica Clínica de la Visión.

¿Cómo identificar problemas de visión en un niño?

Si bien es muy difícil que un niño pequeño reconozca que está viendo mal, pues esa es la visión normal que ha conocido durante toda su vida, el Dr. Raúl Swayne hizo hincapié en algunas señales para identificar que el pequeño podría requerir lentes:

  1. Parpadear muy rápido y fruncir el ceño cuando se observa un objeto.
  2. Taparse un ojo al ver alguna cosa (por lo general, se cubre el ojo que ve menos).
  3. Acercarse mucho para ver los objetos, por ejemplo, libros, pizarras, televisión, juguetes, etc.
  4. Cuando se le pide alcanzar algo, el niño no sabe a dónde dirigirse hasta estar más cerca.
  5. Tropezarse con frecuencia.
  6. Lateralizar la mirada (inclinar la cabeza para un lado al observar).

Para evitar problemas visuales, lo recomendable es realizar revisiones en el nacimiento, a los seis meses, al primer año, y anualmente a partir de esa fecha. Además, desde los tres años, se le podrá hacer un descarte de errores refractivos.

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