Ancianos y niños de Manchay viven la Navidad

Ya va a iniciar el evento navideño de Manchay, en Pachacámac, y cientos de niños corren con todas sus fuerzas para escoger los asientos más cercanos al escenario. A un lado, Grimaldo, de 87 años, y Bernardina, de 76 años, aligeran el paso, no quieren perderse el espectáculo de este año.

“Nos invitaron para ver el show. Van a haber caballos y un show de perros de la policía”, dice Grimaldo, quien llegó desde Yauyos, provincia de Lima, junto a su esposa hace más de 20 años. Sus hijos ya son mayores y se mudaron a otros distritos, por eso ellos disfrutan de estos eventos para salir de casa.

Como todos los años, el Arzobispado de Lima, junto a la parroquia El Espíritu Santo, organizan un evento navideño para los niños del distrito. Este año los ancianos se sumaron a las celebraciones.

“Es una forma de ayudar a las personas más vulnerables y que reciben poca atención. Tratamos de llevar alegría a toda población”, indica el padre José Chuquillanqui, párroco de Manchay.

Por primera vez el evento tuvo la participación de diversas unidades de la Policía Nacional. Los asistentes disfrutaron de espectáculos de baile, shows de la unidad canina y equinoterapia.

—Bus para Manchay—

Ayer, durante el evento, el arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, entregó un bus bautizado como La Ternura de Dios, que servirá para trasladar a los ancianos de Manchay.

“Este bus los recogerá por la mañana para llevarlos a la casa-hogar y luego los llevará nuevamente a sus casas”, aseguró Cipriani.

El padre Chuquillanqui informó que en marzo del próximo año inaugurarán un centro médico geriátrico.