By-pass 28 de Julio: sigue congestión tras fin de marcha blanca

El miércoles 27 de abril, la Municipalidad de Lima dispuso que los túneles del by-pass de la avenida 28 de Julio comiencen a operar las 24 horas con lo que terminó la llamada la marcha blanca. Sin embargo, la congestión vehicular que se registró durante el periodo de prueba no disminuyó.

En un recorrido por la obra de Luis Castañeda, El Comercio comprobó que el gran embotellamiento en los ingresos y salidas de los túneles. Tal es así que los buses del corredor azul quedan prácticamente atrapados en medio de la gran cantidad de autos particulares y taxis que avanzan a paso lento durante las horas punta. La congestión también se ha agudizado en vías cercanas como Arenales y 28 de Julio y el jirón Washington.

Como se recuerda, la construcción del by-pass de 28 de Julio, que demandó una inversión de 58 millones de dólares, fue blanco de críticas debido a que se utilizaron fondos destinados para el proyecto Río Verde.

Además, durante el periodo de prueba se notó la formación de cuellos de botella porque los semáforos no funcionan de forma sincronizada y los paraderos están mal ubicados en Paseo Colón. Debido a esto, expertos en transporte cuestionaron la obra al considerar que no genera un verdadero alivio a la congestión en estas vías.

Conductores opinan sobre el funcionamiento del by-pass de 28 de Julio (El Comercio)