CHRISTIAN UGARTE
En el Perú más de cien mil niñas, entre los 14 y 17 años, se dedican al trabajo doméstico, según el último registro oficial de la encuesta nacional de hogares (ENAHO).
A partir de los 14 años, este problema es casi exclusivamente femenino, aunque, por debajo de esa edad, niños y niñas están inmersos por igual en esta actividad. No obstante, hay organizaciones como La Casa de Panchita que, desde el 2004, intentan revertir esta situación.
La Casa de Panchita recibe al año a 450 niños de las zonas más pobres de Lima. Johanna Reyes, coordinadora del proyecto, cuenta que el 50% de menores abandona la escuela a mitad de año: “Lo hacen por ganar más dinero o presión familiar”.
En esta casa, ellos y sus familias reciben orientación emocional y educativa. La meta es lograr que las familias valoren la educación frente al trabajo y aspiren así a un mejor futuro.