Puente Bella Unión: así cambió el diseño de la obra que demandó dos años

La Municipalidad de Lima anunció que el puente Bella Unión será abierto al tránsito el lunes 17 de julio, a dos años de haber comenzado las obras. 

Llamó la atención hace unos meses que el diseño original del puente se haya alterado en medio de las obras. Incluso, la Contraloría General de la República había indicado que los trabajos se hacían sin guiarse de los planos aprobados. 

La estructura ya no tendrá jaladores, sino que estaría apoyada en pilotes. El cambio se hizo para acabar antes la obra, según la explicación que le dio a El Comercio Jaime Villafuerte, gerente de Promoción de la Inversión Pública de la Municipalidad de Lima. 

“Se decide modificar la ingeniería del proyecto por un tema básicamente de tiempo [...]. Hemos tenido la demora de un año por una tubería matriz de Sedapal”, dijo el funcionario. 

La segunda explicación de Villafuerte fue que el modelo atirantado o colgante no era el más apropiado. “La norma técnica también dice que el puente atirantado debe tener una luz o una longitud de 90 a 100 metros. Este puente tiene de longitud 54,5 metros de largo, nada más. No íbamos a cumplir con los parámetros técnicos”, detalló. 

Este último argumento de la MML abrió una interrogante: ¿Al diseñarse en el 2015 los ingenieros no se dieron cuenta de que el proyecto no se ajustaba a lo que supuestamente indica la norma?

Cabe precisar que pese a que el segundo diseño consideraba el pase peatonal al medio, ahora habrá dos a los lados, donde también deberán circular las bicicletas. El puente tendrá tres carriles por sentido.

La inversión para la construcción del puente Bella Unión es de US$ 15 millones. No obstante, el proyecto completo -que incluye el viaducto Dueñas- costará más de US$ 41 millones, según la adenda N° 2 del contrato de concesión del proyecto Línea Amarilla. Sobre el mencionado viaducto todavía no hay fecha de inauguración.

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