El jefe de la Dirincri, Miguel Núñez, detalló que la fiscalía ha optado por dejar en libertad a los 2 marinos mientras continúan las investigaciones.  (El Comercio)
El jefe de la Dirincri, Miguel Núñez, detalló que la fiscalía ha optado por dejar en libertad a los 2 marinos mientras continúan las investigaciones. (El Comercio)
Ana Briceño

Los marinos David Puris Fabián y Albert Dávila Ojanama, encargados de resguardar a un cambista que llevaba US$ 25 mil en una mochila por el , no tenían licencias para brindar protección personal, según la Superintendencia Nacional de Control de Servicios de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (Sucamec).

Esta institución informó a El Comercio que en el Perú solo hay 107 personas que cuentan con licencias para prestar el Servicio Individual de Seguridad Personal (Sispe) o también llamados, guardaespaldas.

Los dos marinos no figuran en la lista, sin embargo la mañana del martes 29 de agosto, mientras daban seguridad, de manera informal, al empleado de la casa de cambios, Antonio Manayay, abrieron fuego contra una banda de delincuentes que intentó robar la mochila con los billetes en circunstancias que aún son materia de investigación.

La Marina de Guerra del Perú ha precisado que los dos agentes pertenecientes a la Policía Naval brindaban seguridad particular cuando estaban de vacaciones. Los dos usaron pistolas particulares.

Walter Chinchay, abogado del oficial de Mar Albert Dávila –hasta ayer–, detalló que los administradores de la casa de cambios, Inversiones Virgen del Perpetuo Socorro, solían llamar a los marinos cada vez que requerían trasladar fuertes cantidades de dinero.

De acuerdo a la Sucamec, para contar con la licencia de Sispe se requiere copia del contrato de trabajo, curso de formación básica o perfeccionamiento registrado ante la Sucamec, certificado de antecedentes penales, judiciales y policiales.

“Así sean marinos que tengan licencias para portar armas necesitan una licencia especial que tiene una vigencia de un año”, indicó una fuente oficial de la Sucamec.

Asimismo, acotó que ante una emergencia como una balacera, las acciones de los guardaespaldas de personas particulares no puede colisionar con las funciones de la Policía Nacional del Perú.

De otro lado, agregó que a pesar de que han difundido las diferentes modalidades para prestar los servicios de seguridad privada a través de volantes y página web, “a la fecha existe un número indeterminado de personas que no cuentan con autorización” para ‘chalequear’ y estarían realizando la labor, de manera informal.

AVANZAN LAS INVESTIGACIONES
El jefe de la Dirincri, Miguel Núñez, detalló que la fiscalía ha optado por dejar en libertad a los 2 marinos mientras continúan las investigaciones. Hasta el momento, no se ha establecido si la bala que acabó con la vida de la trabajadora de limpieza, Rosa Mamani, pertenecía a una de las armas de los marinos.

El general acotó que se han encontrado contradicciones en las versiones del marino Dávila, quien pese a estar cerca de uno de los maleantes no le disparó. El domingo se difundió un video en el que se le ve haciendo movimientos extraños (que podrían sugerir algún tipo de complicidad con los hampones) segundos antes de iniciarse la balacera.

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