(Mininter)
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Ana Briceño

Durante dos meses, trece personas que vivían en Cañete idearon la manera de apropiarse de terrenos del Estado para después venderlos y estafar a decenas de personas. Una tarde del 2010, finalmente inscribieron en Registros Públicos la Asociación de Posesionarios del Centro Poblado de Nuevo Cañete (Apceponc), la fachada para no generar desconfianza.

Alfredo Marquina Salvatierra fue el primer presidente de la asociación, la que estaba dedicada a usurpar terrenos y a amedrentar a los compradores de esas parcelas. Hoy Marquina está preso en el penal de Cañete, pero seguía dirigiendo esta banda, cuyos tentáculos llegaron a funcionarios de la Municipalidad de Cañete e incluso a policías en actividad.

Sin embargo, la División de Investigaciones de Alta Complejidad y la Dirección de Inteligencia del Ministerio del Interior lograron desarticular la mafia en la madrugada de ayer, tras un año de trabajo. Se trata de Los Temibles de Nuevo Cañete, 26 de cuyos integrantes fueron capturados.

Entre los detenidos figura Angélica Arata Tasso, prima del ex presidente Ollanta Humala y empleada pública de la comuna provincial de Cañete. Según informó la policía, su función era acelerar los trámites que presentaba la asociación para “sanear los terrenos” y ser considerados como los únicos posesionarios. Arata trabajaba en la Subgerencia de Participación Ciudadana de la Municipalidad Provincial de Cañete y ejerció un cargo en la gobernación de Cañete (designado por instancias del Ejecutivo) entre el 2013 y el 2014.
El centro de operaciones de la organización siempre fue el Valle de Concón Topara, ubicado entre los kilómetros 167 y 170 de la carretera Panamericana Sur.

—Modo de operar—
Los Temibles de Nuevo Cañete podían vender 600 metros cuadrados por S/4.000. El general José Lavalle, jefe de la Dirección de Operaciones Policiales, explicó a la prensa que una vez que vendían los predios de manera ilegal –porque el propietario es el Estado– obligaban a los compradores a que contratasen empresas constructoras que eran de la asociación.

De esta manera, la mafia había creado un mecanismo por el que tenía el control absoluto del negocio. “Quienes se negaban a contratar con esas constructoras o con sus albañiles eran hostigados, amenazados e incluso heridos de bala. Podían incluso despojarlos del terreno para vendérselo a otros. Hay decenas de estafados”, precisó un agente policial.

El general Lavalle lamentó que la mafia la conformaran policías en actividad y en retiro de Cañete y de Lima, quienes les brindaban información sobre posibles intervenciones policiales, para que adoptaran precauciones. Entre los detenidos destaca Gregory Silva Alvarado, comisario de San Vicente de Cañete. “Convertía las denuncias en simples ocurrencias”, dijo Lavalle.

La mafia se había aliado con funcionarios de la comuna de Cañete, que aprobaban diversas solicitudes y absolvían requerimientos que presentaba la asociación, como la emisión de constancias de posesión.
La intervención fue realizada por 750 policías y 47 fiscales. La PNP explicó que Los Temibles de Nuevo Cañete se encontraban en una etapa de expansión violenta hacia lotes colindantes, debido a que la zona inicial estaba copada y a la aparición de nuevas asociaciones.

En conferencia de prensa, el fiscal especializado en delitos contra el crimen organizado, Jorge Chávez Cotrina, sostuvo que se allanaron 30 inmuebles en Cañete, Ica y Lima, y que a la mafia se le incautaron S/3 millones. En la casa de María Magallanes, quien se encargaba de amenazar a los compradores de terrenos, se encontraron S/619.300. Los fajos de dinero los tenía acumulados en su dormitorio.

El magistrado resaltó que los detenidos serán procesados por los delitos contra el patrimonio, usurpación agravada y estafa.
La primera ministra Mercedes Aráoz destacó el trabajo de la policía y pidió que los jueces actúen “en la misma dirección y contribuyan a que tengamos a estas personas sancionadas como debe ser”. El ministro del Interior, Carlos Basombrío, destacó que esta fue la megaoperación número 84 en su gestión.

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