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La Municipalidad de San Martín instaló 21 cámaras de videovigilancia con reconocimiento facial en la zona de Fiori. (Foto: Municipalidad de San Martín de Porrres)
Redacción EC

La Municipalidad de San Martín de Porres instaló 21 cámaras de videovigilancia con reconocimiento facial en la zona de Fiori, donde el pasado mes de setiembre ocurrió un doble homicidio. Asimismo, entregó la nueva central de monitoreo de Seguridad Ciudadana.

Las cámaras están instaladas en las intercepciones de las avenidas Tomás Valle, Túpac Amaru, Miguel Ángel, Marco Polo, Enrique Fermín, Alfredo Mendiola y la Panamericana Norte.

En declaraciones a Canal N, el alcalde de SMP, Julio Chávez, detalló que la moderna central permitirá reconocer facialmente a las personas, quienes serán derivadas a la data que manejará el personal de serenazgo. “En caso la persona tenga algún tipo de requisitoria o este buscado por la justicia, inmediatamente va a saltar en nuestro sistema y podremos comunicarle a la policía de manera inmediata para su intervención”, indicó.

Asimismo, señaló que este sistema permitirá hallar a las personas desaparecidas. “Las personas podrán hacer la denuncia, darnos los datos y así poder ayudar en su pronta ubicación”. Por otro lado, precisó que en los postes se han instalado luminarias y un sistema de perifoneo que permitirá alertar a los vecinos sobre la presencia de delincuentes, siniestros, entre otros.

Vale precisar que, las cámaras fueron obtenidas por la Municipalidad de San Martín de Porres a través de un convenio con la empresa de Telecomunicaciones Desarrollos Terrestres.

SMP

Descuartizamiento en SMP

Como se recuerda, el pasado lunes 9 de septiembre se hallaron los cuerpos descuartizados del venezolano Rubén Matamoros Delgado y el peruano Jafet Torrico Jarasu. Sus restos fueron dejados en dos puntos del distrito de San Martín de Porres y uno en el Rímac.

Tras el doble homicidio llevado a cabo en el hotel Señor de Sipán, en San Martín de Porres, la Policía Nacional capturó a Alexander Salazar Álvarez, Verónica Andreina Montoya Araujo, ambos de 25 años, Abraham Alberto Perozo Borjas, de 28 años, y Jacksiver Jhoaury Salcedo Campos, todos de nacionalidad venezolana, presuntos implicados en el descuartizamiento.









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