Como la municipalidad no lo hizo, los propios vecinos del asentamiento humano Las Casuarinas construyeron sus muros de contención. (Anthony Niño de Guzmán / El Comercio)
Como la municipalidad no lo hizo, los propios vecinos del asentamiento humano Las Casuarinas construyeron sus muros de contención. (Anthony Niño de Guzmán / El Comercio)
Yasmin Rosas

En la calle Los Álamos del asentamiento humano Las Casuarinas, en , se debió construir un muro de contención. La obra, valorizada en S/10.801, fue cancelada a Víctor Ramón Urbina Díaz el 2 de diciembre del 2011, pero nunca se ejecutó.

Ese es uno de los 17 proyectos que el alcalde Rafael Álvarez Espinoza (PPC) debió llevar a cabo durante su primera gestión (2010-2014). Las obras eran parte del programa social distrital Manos a la Obra, que favorecía, sobre todo, a las zonas más vulnerables.

El viernes 22, el Poder Judicial (PJ) condenó a Álvarez a seis años de cárcel por el delito contra la administración pública, en la modalidad de colusión en agravio del municipio.

De acuerdo con la sentencia de la Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Lima Norte, el burgomaestre defraudó las expectativas del Estado, favoreció a los falsos proveedores Walter Luis Medina Quispe y Víctor Ramón Urbina Díaz, quienes fueron sentenciados a cuatro años de pena privativa de libertad suspendida. Entre los otros funcionarios involucrados, también figuraba el actual alcalde de Breña, Ángel Wu, quien fue gerente de administración de Carabayllo entre el 2011 y el 2012, pero que fue absuelto del delito de colusión simple.

Los gastos de la supuesta ejecución de esos proyectos ascienden a S/102 mil.

—Obras fantasmas—
Al ver la negativa de la gestión municipal, los vecinos del asentamiento humano Las Casuarinas optaron por construir sus propios muros de contención. Para ello, realizaron largas jornadas de trabajo comunitario.

“El alcalde se desentendió y nunca atendió a los dirigentes”, explicó Lidia Campos Villanueva, quien vive 18 años en el lugar.

El Comercio hizo un recorrido por las supuestas obras y comprobó que la mayoría de ellas no existe.

En la zona de El Progreso, se debió hacer el mantenimiento de siete losas deportivas ubicadas en los sectores 1, 2, 3, 4 y 5. Este Diario encontró tres losas deportivas, una construida por la comuna metropolitana, otra por los vecinos en cooperación con un organismo internacional y otra hecha también por los vecinos de la zona de El Paraíso en el 2000.

En tanto, el municipio señaló que “está a la espera del pronunciamiento del Jurado Nacional de Elecciones y su responsabilidad de designar a la nueva autoridad máxima”. El PJ informó a este Diario que el alcalde Álvarez se encuentra en calidad de prófugo.

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