Los Carrasco Melo, ganadores de powerlifting. Foto: Difusión.
Los Carrasco Melo, ganadores de powerlifting. Foto: Difusión.
Redacción EC

Si alguien le pidiera a la familia Carrasco Melo enumerar sus características, ellos nombrarían la unión, el compromiso y sobre todo la fuerza. En ese orden, en esa magnitud. Razones no les faltan.

El último fin de semana, en el certamen Sudamericano de Powerlifting (levantamiento de potencia) realizado en la capital de Paraguay, colocaron su apellido y el nombre del Perú en lo más alto del podio. 

Este clan —conformado por el patriarca Jacob Carrasco, su esposa Norma Melo y su hijo Jacobs Carrasco Melo— partió con la ilusión de conseguir algo único: batir récord panamericano y alzarse con la medalla de oro en sus diferentes categorías.

Por su puesto, su disciplina devino en éxito: consiguieron alzar tres medallas de oro, la prueba de que los sueños solo se alcanzan con empeño y dedicación.

El menor de los Carrasco, Jacobs, heredero del coraje y fuerza de quienes lo guiaron en este deporte de portencia y fuerza, recordó que, desde niño, quiso subir al podio y colgar una presea de oro en su cuello.

Mientras que el pequeño Jacobs soñaba con eso, su madre, Norma Melo, se medía con atletas de trayectoria de Argentina, Brasil y Chile. Así, a pulso, batió récord panamericano en peso muerto con 140.5 kilos y se alzó con el oro.

La vida, sin embargo, les traía más sorpresas: la claudicación llegó con el patriarca Jacob Carrasco, atleta del team Universe Nutrition. Él demostró que el éxito es un ejercicio de la constancia.

Con un récord de 240.5 en peso muerto y 220 kg en squat, logró un total de 583 kg lo cual establece un nuevo récord panamericano para el Perú.

No cabe duda que la familia Carrasco Mela tiene objetivos bastante ambiciosos. ¿Su próxima conquista? El mundial del próximo año.

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