Gladys Pereyra Colchado

El 23 de marzo del 2017 fue un día de fútbol. La selección peruana enfrentaba a Venezuela por las Eliminatorios y Shirley Villanueva hizo lo que medio país haría aquella vez: salir del trabajo, reunirse con amigos, ver el partido. Envió un mensaje a su mamá, avisó que estaba en un chifa por la universidad San Marcos y que llamaría al terminar. Lo único que encontraron de ella después fue la ropa que llevaba, arrojada en distintos puntos de la ciudad. Tenía 24 años el día que desapareció.