Hernán Medrano Marin

Misael y Luis recuerdan que en una jornada normal podían cargar hasta 40 kilos de pescado en sus hombros y regresar satisfechos a sus casas luego de una ardua faena en el mar de El Pedregal. Hoy, esta y otras ocho playas colindantes a Chacra y Mar, lucen llenas de petróleo y basura.