(Archivo El Comercio)
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Gladys Pereyra Colchado

Se estima que en el Perú unas 200 mil personas tienen de , cifra que representa cerca del 12% de la población mayor de 65 años. Por ello, en junio pasado se publicó la ley sobre prevención y tratamiento de esta enfermedad y otras demencias.

Medio año después, hoy salió el Reglamento de la que establece la creación del Registro Nacional de Personas con Enfermedad de Alzheimer y Otras Demencia, así como beneficios laborales para familiares y personas que tengan a su cargo a pacientes con estos trastornos en grado severo.

El Dr. Yuri Cutipé Cárdenas, director de Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsa), explica que se busca mitigar las dificultades, muchas de ellas económicas, que atraviesa la familia con uno o más miembros con Alzheimer o demencia. 

“Cuando hay una persona con estos trastornos, la familia tiene que dedicar, dependiendo del nivel de deterioro, a una persona para su cuidado permanente. Muchas veces el cuidador tiene que dejar el trabajo o los estudios y en la mayor parte de casos es una mujer”, indicó a este Diario.

Los beneficios laborales que establece el reglamento son el permiso remunerado de una jornada laboral al año (por horas, no necesariamente continuas), así como facilidades en el cambio de horario o turnos de trabajo, de modalidad presencial  a teletrabajo, permisos remunerados adicionales sujetos a compensación, licencias con goce y sin goce de haber, licencias a cuenta de vacaciones, adelanto de vacaciones y otras facilidades que se otorguen de común acuerdo con el empleador.

Alzheimer

Es una demencia neurodegenerativa caracterizada por un compromiso severo de la memoria, incapacidad para comprender o formular el lenguaje, y pérdida de capacidad para reconocer objetos, personas, sonidos, formas u olores.

Además, se plantea la posibilidad de que quienes presenten esta enfermedad, cuyo grado severo debe ser certificado por el médico tratante, podrán recibir los servicios de salud en sus viviendas.

“Un servicio de apoyo domiciliario puede paliar las dificultades de los familiares y contribuir unas horas de cuidado para personas con cuadros severos, de modo que la familia tenga la posibilidad de no descuidar el trabajo o estudios”, agregó Cutipé.

El reglamento entra en vigencia desde mañana, sin embargo, aún quedan pendiente los lineamientos para el monitoreo, supervisión y evaluación del cumplimiento de lo establecido en la ley, así como el Plan Nacional para el tratamiento del Alzheimer y otras demencia. Se estima que tomaría al menos otros seis meses. Su implementación iniciaría en el 2020.

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