Candidatos al volante: #NoTePases pone a prueba a Gustavo Guerra García

Gustavo Guerra García no sabe manejar un auto. De hecho, nunca sacó su licencia de conducir, como consta en el portal del Ministerio de Transportes (MTC). Sin embargo, su condición de peatón, ciclista y pasajero del trasporte público, según él, le ha permitido entender las dificultades a las que se enfrentan a diario los limeños que no están detrás de un volante.

Partimos junto a él –de copiloto– un miércoles en hora punta y lo primero que encontramos fue un desbordado caos vehicular que nos obligó a estar casi 50 minutos circulando a baja velocidad en un corto traslado entre los distritos de Jesús María y Surquillo.

Para el aspirante al sillón municipal por el partido Juntos por el Perú, la congestión se resolvería con varias medidas simultáneas. Una de ellas es darle prioridad al transporte público urbano con un sistema integrado de transporte; establecer un sistema semafórico programado, que facilite la fluidez; a la vez, promover como prioridad el uso de la bicicleta, implementando más ciclovías seguras e iluminadas. Otra propuesta para aliviar el tráfico es propiciar la reducción del número de taxis en el área metropolitana, desterrar a los colectiveros obligándolos a formalizarse y limitar el servicio de mototaxis solo a las vías locales distritales.

Nacido en Bélgica, pero inscrito como peruano en el consulado peruano de Amberes –una de las ciudades con mejor sistema de transporte de Europa– el candidato Guerra García propone también desconcentrar el área metropolitana con subcentros de la ciudad, a partir de vías expresas, arteriales y colectoras.

Guerra García también prioriza, en sus propuestas en materia vial, una política de subsidios para financiar líneas y rutas que vayan hacia zonas donde no hay medios de transporte y así reducir el costo de los pasajes para aquellos que viven en zonas periféricas.

—A favor y en contra—
Según especialistas consultados por este Diario, varias de las propuestas en materia vial de Guerra García se verán limitadas por la futura creación de la autoridad única del transporte urbano de Lima y Callao, cuyo proyecto fue recientemente aprobado en primera votación por el Congreso de la República.

“Esta autoridad le quitará muchas facultades al futuro alcalde o alcaldesa en materia de transporte y tránsito. El candidato no va a tener facultades de ejecución. La autoridad limitará todas las funciones. Lo que ofrecen ahora los candidatos no va a ser posible de ejecutar”, dice Alfonso Flórez, gerente general de fundación Transitemos.

Guerra García piensa lo contrario y es más optimista. “Con la creación de la autoridad del transporte de Lima y Callao, todas las propuestas que he formulado se refuerzan. Por ejemplo, antes el MTC decidía de forma autónoma qué hacer con las líneas del metro. Hoy ya no será así. Tanto el MTC como la Municipalidad de Lima trasladan sus competencias a una nueva autoridad que tiene autonomía y ocho directores. Así que la autoridad obliga a las dos instancias más importantes en el transporte a trabajar juntas”, añade.

Varias de sus propuestas en transporte coinciden con aquellas que los limeños leímos en el plan de gobierno de Susana Villarán cuando postuló a la Alcaldía de Lima (Guerra García fue presidente de Pro Transporte en esa gestión), entre ellas la de ejecutar un sistema de transporte articulado e integrado que facilite los intercambios de los modos de viaje. Para expertos en materia vial, no hay garantías de que estas medidas no se trunquen nuevamente, ni de que tengan el apoyo de otros partidos.

Sobre ello, el candidato Guerra García cree que sí se podrán ejecutar, pues el candidato ganador iniciaría la gestión con más de la mitad de regidores propios. “Yo formulé esas propuestas anteriores (con Villarán) y también estas. Es continuidad de pensamiento”, dice.