SONIA DEL ÁGUILA (@soniahafid) Redacción Online

Juan Carlos Fisher no es mago, tampoco es hechicero, pero tiene la magia de hacerte destornillar de risa o llorar de tristeza contándote un cuento. Su nombre y las obras que dirige son sinónimo de éxito en el circuito de teatro limeño, que cada año crece más y más. Basta mencionar alguna de ellas, como la célebre Rojo, la divertida Toc*Toc, la magistral Bicho o el musical Hairspray, para saber que estamos frente a un gran director de teatro, aunque él no lo considera así. Me faltan muchos años y mayor experiencia para ser grande, dice.

Tienes 31 años y ya has dirigido 20 obras, en un país donde la gente no va mucho al teatro. ¿Cómo lo has logrado? He tenido la suerte de tener amigos entrañables que son grandes actores. Con ellos, precisamente, he podido hacer cosas fantásticas. El año pasado empecé a trabajar con Wendy Ramos y realmente estoy enamorado de ella, también he trabajado con Albero Ísola, Norma Martínez, Rómulo Assereto, Carlos Carlín, Gianella Neyra, Gisella Ponce de León, actores que siempre he admirado.

El 16 de abril estrenas El apagón y lo haces después de Toc*Toc, una de las obras más exitosas que has hecho. ¿Estás apostando por la comedia? Estrenamos Toc*Toc el 2012 y la retomamos este año a pedido del público. Y sí, tienes razón, ha sido un éxito, y estamos muy agradecidos con la gente que ha apoyado nuestro trabajo. Hemos hecho más de cien funciones en Lima y ahorita que estamos terminando la temporada la gente nos pide que sigamos. Sin embargo, creo que a la gente no le importa si le cuentas un drama o una comedia, lo que le importa es que le cuentes bien la historia.

¿Consideras que Toc*Toc es en el teatro, lo que Asu Mare es en el cine? Es impresionante lo que ha pasado con Toc*Toc, pero las cifras son de otra envergadura, nosotros tenemos solo 500 butacas, en cambio Asu Mare se ha presentado hasta en cinco salas al mismo tiempo. Es una locura y me alegro que sea así, estimo mucho a Carlos Alcántara.

¿Crees que se repita el éxito de Toc*Toc con El apagón”?* Ojalá, sería extraordinario. Mientras tanto nos estamos divirtiendo con los ensayos. Gisela Ponce de León, Raúl Zuazo, Wendy Ramos, Magdyel Ugaz…, son actores extraordinarios, somos bien amigos y la estamos pasando genial.

¿De qué trata la obra? Es una obra ambientada en Inglaterra, en Londres, donde un joven escultor, y su recién prometida han cogido prestados algunos carros y antiguos muebles del piso de su vecino, pero sin su permiso, con el fin de impresionar a un millonario coleccionista de arte, así como al padre de la novia. Cuando falla la energía eléctrica todo se complica. La obra empieza en total oscuridad, pero cuando ocurre el apagón se enciende la luz, entonces ves lo que el resto de personajes no, te permite ver cómo somos cuando nadie nos ve, cómo reaccionamos. Es muy divertida.

¿Qué te llevó a apostar por esta obra? La historia, que es muy divertida. Para nosotros es una obra muy especial porque la vamos a estrenar en un teatro totalmente renovado, con espacio para 700 personas. Estamos remozando el Pirandello para ofrecer al público un mejor servicio, con estacionamiento, valet parking, cafetería…. La zona es fantástica.

¿De las 20 obras que has hecho cuál te ha dado mayor satisfacción? Creo que cada una ha significado logros personales y grupales. La primera obra que hice con Rómulo Assereto (El hombre almohada) la recuerdo con mucho cariño. También tengo gratos recuerdos de Bicho, Las brujas de Salem, Una pulga en la oreja, Hairspray…, todas me han dado cosas especiales.

Fuiste premiado como Mejor Director de Teatro por Luces de El Comercio en cuatro oportunidades. ¿Cómo recibes los premios? ¿Trabajas en función a ellos? De ninguna manera, nunca pienso en ellos. Nos dejamos llevar por la intuición, hacemos lo que nos gusta, lo que nos hace felices. Con Corazón normal, una obra sobre una pareja homosexual, donde al principio hay una reacción violenta, he vivido las sensaciones más lindas, porque al final el público terminaba conmovido. Lo más bonito es hacer cosas que te salgan del corazón y eso es lo que siempre hago.

¿Esa es la fórmula de tu éxito? Me pones nervioso con tus preguntas. Siento que mi trabajo ha funcionado por el equipo que me ha acompañado, principalmente por mi socio Rómulo (Assereto) y por la asesoría de Chela de Ferrari, también por el equipo de La Plaza o de las otras productoras que, en su momento, me han acompañado, además del equipo de actores, que son los que potencian mi trabajo. La fórmula es rodearse de gente que realmente te inspire y te rete.

¿Extrañas actuar? Ni muerto volvería a actuar, sería un harakiri para el teatro nacional. Actúo mal, soy un desastre, por eso me tienen como director.

¿Qué obra tienes pendiente hacer? Todavía no hago un clásico universal, como alguna de Shakespeare. Siento que para eso están los maestros, como Chela de Ferrari, Alberto Ísola u otros grandes directores.

¿No te consideras un gran director? Me falta mucho aún. Soy un director joven, he hecho varias obras, pero creo que todavía necesito crecer más en la vida, vivir más para tener mayor seguridad. Cuando hice mi primera obra era asistente del asistente, eso hace 16 años. En ese entonces leí Las brujas de Salem y doce años después la terminé dirigiendo, fue un sueño cumplido, y así ha pasado con cada obra que he dirigido. He ido cumpliendo sueños poco a poco y aún me falta mucho por hacer.

¿Está en tus planes hacer cine? Lo estoy diciendo hace tanto tiempo que parece floro, pero está avanzando y espero que el próximo año se concrete, aunque hay tanto trabajo en teatro que siempre termino postergando ese tema. Ojalá salga.

¿Por qué crees que funcionó Asu Mare ”? Porque Cachín es impresionante, es un monstruo como actor, es un gran comediante, también tiene que ver la historia, todos la pasan bien con la película, mi hermano, mi madre, yo también me he divertido. El elenco de actores es un lujo y creo que han hecho una súper campaña.

EL DATO El apagón se estrena el 16 de mayo en el renovado teatro Pirandello en Lince.