MELVYN ARCE @estenopeica

A su manera este libro es muchos libros, pero sobre todo es dos libros. Así empieza el Tablero de Dirección que abre Rayuela, la obra que revolucionó la literatura en habla hispana con su publicación en Argentina hace ya medio siglo.

Conferencias, debates y lecturas del texto conmemorarán esta semana en el mundo el aniversario de la obra más emblemática de Julio Cortázar, que vio la luz un 28 de junio de 1963.

La novela, que inicialmente se iba a llamar Mandala, es considerada por muchos autores como fundamental dentro de la literatura hispana. Aquí conversamos con algunos conocidos autores para que nos relaten sus experiencias con el libro y nos digas si, desde su punto de vista, ya deberías haber leído esta novela.

LA IMPRONTA DEL AUTOR Para Alonso Cueto, autor de La hora azul, Rayuela es una novela que quedará para siempre en la memoria colectiva por tener una de las más importantes características de las grandes obras: llevar el sello de su autor.

Uno puede reconocer las grandes obras. Decir esto es de Cortázar, como decir esto es de Vargas Llosa o de Borges. Eso es lo que hace que un libro quede para siempre y es algo que tiene Rayuela, indicó el escritor.

Para Cueto, aunque el libro tiene elementos que son de mero divertimento, lo que hace a Rayuela trascendental y recomendable para su lectura son sus extraordinarios fragmentos: La carta de La Maga a Rocamadour, la primera secuencia en la que Olivera busca a La Maga en la calle y no sabe si la encontrará o cuando se pierde el terrón de azúcar en la mesa de los comensales. Cosas así que son de una enorme calidad literaria y de una enorme potencia humana, añade Cueto.

UNA NOVELA QUE ENSEÑA Para Diego Trelles Paz, finalista del premio Rómulo Gallegos por la novela Bioy, Rayuela es una obra que le enseñó mucho del oficio literario y que, desde su perspectiva, puede seguir siéndolo para nuevas generaciones de autores.

Esta novela era casi una leyenda por la manera en la que había sido concebida, por esta forma tan novedosa en la que el lector es impulsado a seguir un tablero de direcciones. Recuerdo que la leí más de una vez cuando era joven. La primera vez lo hice de la manera lineal, la segunda hice el juego. Me sorprendió mucho lo que había logrado Cortázar porque había roto con esa concepción de que el lector era guiado de la mano por el novelista, de que el lector es pasivo. Y este es un tema que siempre me ha interesado y es algo que yo practico en mi literatura. Yo creo que el lector, siguiendo ideas de Barthes, también escribe. La novela ponía esto en ejecución y hasta le proponía al lector ciertos retos como leer entre líneas. Todos estos intentos eran bastante audaces y a mí me enseñaron mucho. Rayuela es una novela que a mí me enseñó bastante, explicó el autor sobre la novela de Julio Cortázar .

OTROS PUNTOS DE VISTA Alonso Alegría, dramaturgo y director teatral, tiene un punto de vista diferente. Él reconoce que Rayuela no es su obra favorita de Cortázar y que hasta le costó trabajo terminarla cuando llegó a sus manos.

Siempre he tenido la impresión de que Rayuela es un pajazo. Claro, el pajazo de un genio. Pero si es así, si viene de un genio pues qué importa, aseguró Alegría, quien si tuviera que quedarse con algún trabajo del argentino serían los cuentos La vuelta al día en ochenta mundos e Instrucciones para John Howell, que tiene que ver con lo que a él más le gusta: el teatro.

Para el chileno Alberto Fuguet, Rayuela tampoco le parece de grandes méritos literarios: A pesar de que yo me considero moderno, nunca entendí eso (del tablero de dirección), así que la leí en orden cronológico. No la entendí del todo. Además, yo antes había leído a Vargas Llosa y Cortázar me pareció alguien tan inferior y de un mundo tan lejano a mí. Un mundo que no me parecía grato. Y en ese tiempo yo vivía una realidad política que me hizo ver al personaje de La Maga como alguien repelente.

Así mismo, Fuguet no cree que Rayuela sea una obra imprescindible, pues hasta le parece que no ha envejecido bien.

Me parece que libros como Cien años de soledad o La ciudad y los perros han envejecido mejor. Cortázar, en general, no ha envejecido bien, dijo el chileno.

Y tú, ¿recomendarías la lectura de Rayuela?