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El consultor cibernético denunció la intromisión de las autoridades en ámbitos privados. Lamentablemente, los mejores tiempos de Stone ya pasaron.

Un joven cándido que no sabe calibrar sus límites se estrella contra la espeluznante realidad: la película "El Círculo" –que se estrena en los cines locales el jueves– toma este recurrente esquema y lo sitúa en los tiempos frenéticos y alterados de Internet.

Si bien "El Círculo" no descubre la pólvora –hace rato que series como "Black Mirror" vienen creando maravillosas distopías sobre el lado oscuro de la era digital–, la película tiene varios ganchos que merecen ser atendidos. Ahí están las presencias de Emma Watson y Tom Hanks. La primera se sigue esforzando para no dejarse encasillar por la saga mágica de Harry Potter y apuesta por estar en cintas que abordan asuntos incómodos de la realidad. En cuanto a Tom Hanks, en "El Círculo" él es el villano, lo que es toda una novedad en una trayectoria plagada de personajes conflictuados pero nobles (algunos de ellos incluso simbolizan la esencia del patriotismo en medio de las contradicciones de los Estados Unidos).

—Ambición sin fronteras—
Durante una entrevista de trabajo que se aprecia en "El Círculo", Mae Holland (Emma Watson), una veinteañera que tiene un padre enfermo y que aún no ha recibido muchos golpes de la vida fuera de su casa, confiesa que uno de sus más grandes miedos es no sacarle todo el provecho a su potencial, como si estuviera dispuesta a hacer lo que sea para crecer a nivel profesional. La compañía a la que postula se llama precisamente El Círculo, una corporación del rubro digital que cuenta entre sus fundadores a Eamon Bailey (Tom Hanks), una suerte de Steve Jobs o Bill Gates maquiavélico.

Mae se moverá como pez en el agua en la empresa, aunque pronto sentirá dudas cuando El Círculo lance un ambicioso proyecto que desafía los límites éticos y se inmiscuye en el ámbito íntimo, como si el espacio digital fuera una tierra de nadie. La promesa de la libertad y las oportunidades en los Estados Unidos es en el fondo una pesadilla. Queda por saber si la protagonista seguirá ciegamente su ambición o una sombra oscurecerá su entusiasmo.

—Artífices de un futuro incierto—
El estadounidense James Ponsoldt fue el encargado de dirigir "El Círculo". Esto representa toda una incógnita, ya que en la filmografía del realizador destacanpelículas con un aire independiente, existencialista y romántico que carecen de los ingredientes de una intriga tecnológica. A cruzar los dedos.

Otro responsable de la cinta es el escritor y guionista Dave Eggers, cuya novela homónima inspira a "El Círculo". Abundan las comparaciones entre el libro y la película. Desafortunadamente, más de una crítica es gentil con la novela pero despiadada con su versión cinematográfica. Veremos si están equivocadas.

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