Juan Luis  Del Campo

Un humilde taxista de Nueva York junto a una mujer misteriosa están destinados a salvar la Tierra. Con acción, aventura, alienígenas exóticos y frases tan memorables como “Leeloo Dallas multipass”, este 7 de mayo se cumplieron 25 años de la salida de “” (“The Fifth Element”), una de las película de ciencia ficción más memorables y queridas de las últimas décadas, responsable de reforzar la carrera del actor y su director Luc Besson, así como lanzar al estrellato a su protagonista .

"El quinto elemento"
¿De qué va la trama?

Cuenta la historia de Korben Dallas (Willis), un exsoldado que ahora se gana la vida taxeando en el Nueva York del siglo XXIII. Su humilde y mediocre vida termina con la llegada de Leeloo (Jovovich), una hermosa mujer sin memoria cuya existencia es clave para activar un arma que defenderá la Tierra de una fuerza maligna. Tras sus pasos se encuentra el siniestro Jean-Baptiste Emanuel Zorg (Gary Oldman), un empresario cuyas nebulosas metas buscan también la destrucción del planeta.

La trama de “El quinto elemento” comenzó a hilarse cuando Besson tenía solo 16 años como una manera de entretenerse. Así lo contó a : “En ese momento vivía a 60 kilómetros de París, casi en medio de un bosque, con un padrastro que no quiere música, ni televisión, ni nada. Así que estoy muy aislado. Y básicamente tienes tres soluciones. La primera es volverte alcohólico, la segunda es suicidarte, y la tercera es escapar con tu pluma. ‘El quinto elemento’ fue el escape perfecto”.

"¡Leeloo Dallas multipass!". Bruce Willis y Milla Jovovich en una icónica escena de "El quinto elemento". (Foto: Columbia Pictures)
"¡Leeloo Dallas multipass!". Bruce Willis y Milla Jovovich en una icónica escena de "El quinto elemento". (Foto: Columbia Pictures)

Pero tuvieron que pasar décadas para que la historia empezara a ser producida, con Besson antes haciéndose conocido internacionalmente por películas como “The Big Blue” (1988) y “La Femme Nikita” (1990). Si bien el realizador estaba planeado llevar la historia de “El quinto elemento” a la gran pantalla desde la década de los 90, no fue hasta el éxito de “Léon: The Professional” (1994) que Besson encontró un estudio dispuesto a pagar los US$90 millones de presupuesto que requería el proyecto.

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Elementos claves

Quizás el elemento más clave para el triunfo de “The Fifth Element” fue su elección de protagonistas, en particular el conseguir a Bruce Willis, una de las mayores estrellas de acción de ese momento. Si bien en un inicio Besson consideró tanto a Mel Gibson como a Willis para el papel principal, con los ajustes del presupuesto pronto tuvo que abandonar la idea. Sin embargo, un encuentro fortuito entre la estrella y el realizador durante un almuerzo con su entonces esposa Demi Moore llevó a que este se interesara en el proyecto.

[Besson] vino a nuestra casa en Malibú. Me gustó Luc, me gustó la historia, me gustó la idea. Pensé que sería divertido ir a Francia y hacer una película”, recordó Willis décadas después.

Besson tuvo más facilidades para encontrar a su villano, contratando a Gary Oldman después de haber trabajado con él en “Léon: The Professional”. En el caso del rol del extravagante Ruby Rhod, aquel locutor de radio convertido en compañero de Korben, este recayó en el comediante Chris Tucker debido a que la elección original, el músico Prince, rechazó el papel por su vestuario demasiado estrambótico.

Mientras tanto, Milla Jovovich fue elegida tras un largo proceso de audiciones en las que compitió con cientos de candidatas, el cual ganó por su capacidad de inmediatamente “enamorar al espectador”. Fue esta cualidad la que también llevó a que el realizador iniciara un tórrido romance con la joven actriz - a la que le llevaba alrededor de dos décadas de edad -, que concluyó con un rápido matrimonio y un divorcio solo dos años después.

Fuera de este mundo

Otra cuestión clave para la longevidad de “El quinto elemento” es su distintivo sentido estético, que difiere de versiones más oscuras como “Blade Runner” para darnos una más brillante, aunque igualmente distópica, visión de lo que le podría deparar a la humanidad.

Esta fuerte identidad visual se logró gracias a la elección de diversos artistas en la vanguardia de su género. Para el diseño del filme, Besson contrató a los dibujantes de cómics Jean Giraud (“Blueberry”, “The Incal”) y Jean-Claude Mézières (“Valérian and Laureline”), ambos íntimamente familiarizados con el género de la ciencia ficción.

Milla Jovovich tenía 18 años cuando audicionó por primera vez para "El quinto elemento". (Foto: Columbia Pictures)
Milla Jovovich tenía 18 años cuando audicionó por primera vez para "El quinto elemento". (Foto: Columbia Pictures)

El reconocido diseñador de moda Jean-Paul Gaultier, a quien logró reclutar gracias a una admiración mutua, diseñando alrededor de 900 atuendos para la producción. “[Luc] es muy meticuloso y tiene un gusto excelente para los decorados y el vestuario. Me encantan las colaboraciones en el cine o la danza, ya que son un poco de aire fresco para mí. Intento hacer de Gaultier, pero al servicio de la historia y del director”, indicó .

“El quinto elemento” se estrenó el 7 de mayo de 1997 en el Festival de Cannes, solo dos días antes de su estreno en los Estados Unidos y Canadá. La recepción de la película por parte de la crítica fue mixta y si bien se alabaron sus fuertes componentes visuales, hubo quejas también sobre el ritmo de la historia. A pesar de esto el filme triplicó su presupuesto y recaudó US$263.9 millones a nivel mundial, con la mayoría de las ganancias en territorios fuera de Norteamérica.

El filme también dio origen a un videojuego del mismo nombre para PlayStation y PC, cuya pésima calidad no queda en discusión (y que generó un trauma permanente en el escritor de esta nota), aunque eso ya es discusión para otro momento.

Lo que no se puede dudar es la importancia de “El quinto elemento”. Un artefacto de los 90, la cinta de Luc Besson es un logro visual y de efectos especiales mecánicos, un proyecto como los que ya no se ven en la actualidad. Su continua popularidad a 25 años de su salida demuestra porqué debe ser considerado un clásico de la ciencia ficción.