ANTONIO ALVAREZ FERRANDO @Tonyalfe83

Fue en el año 1983 cuando la Fania All Stars, la orquesta de Ray Barretto, lanzó al mercado el disco titulado “Tremendo trío”, un trabajo que incluía ocho temas y cuya punta de lanza era una canción de la autoría del cubano Miguel Matamoros. Fue un éxito rotundo y colocó a sus intérpretes en la lista de los mejores dúos del pentagrama salsero. Ellos eran: Celia Cruz y Adalberto Santiago.

¿Cómo nace la idea de juntarse con Celia para esa producción?, le pregunto a Adalberto: “La idea fue de Fania, mientras que Barretto eligió el tema. Era un número viejísimo que había sido pegado décadas atrás por Los Maraqueros de Cuba. Nuestra versión causó tal furor que hoy en día no puede faltar en mi repertorio. Es más, en mi último show en Perú lo canté a dúo con Laura Mau”.

Si bien a ambos se les recuerda en shows que hicieron juntos, su amistad data de mucho antes de haber compartido tarima como estrellas de la Fania All Stars. Fue en Nueva York donde se conocieron, allá por el año 1961 aproximadamente, cuando la ‘Guarachera del mundo’ actuó un corto tiempo como solista pese a pertenecer a las filas de la mítica Sonora Matancera.

“Por esa época yo trabajaba en el club Caborrojeño, un punto de reunión de latinos. Yo integraba una orquesta de planta donde tocaba el bajo y cantaba. Celia llegaba a cantar allí al menos una vez al mes. Así fue como tuve la dicha de conocerla y acompañarla musicalmente”, comenta tras el hilo telefónico el intérprete de ‘Quítate la máscara’ y ‘Alma con alma’.

¿Qué puede significar para un cantante haber sido parte de las dos orquestas más importantes de la música latina como La Sonora Matancera y La Fania All Stars?, es la inquietud que le transmito a Adalberto, quien responde lo siguiente:

“Celia Cruz ha sido lo más grande en nuestra música. Podía haber otras cantantes, pero ella era única. Ni en cincuenta años nacerá otra cantante como ella. Sabía lo que hacía. Siempre la recuerdo mucho, como cuando la bromeaba con sus pelucas. Una gran persona como lo fueron Tito Puente y Ray Barretto. Y cuando interpreto los números que hicimos juntos siento que me acompaña espiritualmente”.