FRANCISCO MELGAR WONG

Me siento bien, contento de volver al Perú, dice José Feliciano a través de la línea telefónica. Estoy ansioso por que el público peruano vuelva a escucharme, porque todavía soy un artista fuerte. Mi voz aún está bien”, afirma. ¡Quién podría dudar de ello! La prueba más reciente está en el dúo que grabó hace un par de años con el reggaetonero Farruko: Su hija me gusta. Después de que el joven intérprete de música urbana recitara algunas líneas con voz frágil, desganada y adolescente –típica de estos tiempos– Feliciano entra al tema como un ciclón y echa abajo todo lo que encuentra a su paso. Con ello, deja en claro que su voz sigue siendo una de las fuerzas naturales más reconocibles y poderosas en el firmamento de la canción en español.

— ¿Es consciente de que posee una de las pocas voces que pueden ser reconocidas de inmediato en el ámbito de la música en español? Todo el mundo es diferente, pero yo tengo el lujo de poder decir que con mi voz puedo pararme al lado de quien sea. Hay cantantes que a veces hacen dúo con otros y no acoplan. Pero yo sí, yo acoplo bien y con todos. No tengo nada que temer en cuanto a mi arte.

— Los dúos con José Feliciano podrían considerarse un género en sí mismo. ¿Qué es lo que más le gusta de cantar junto con otros intérpretes? Pero a mí los dúos no me gustan mucho, aunque depende de quién sea. Cuando yo grabé “Con ella” fue un honor cantar con José José. Cuando hice el dúo con Farruko fue porque su compañía disquera me invitó y también fue un honor cantar juntos. Yo quisiera hacer un dúo, por ejemplo, con el compositor peruano Gian Marco, y también con Shakira. Acabo de terminar un proyecto en el que hice un dúo con el hijo de Plácido Domingo: Junior. Él se parece mucho al padre en cuanto a la voz, pero la mía se acopló a la perfección. Lo que quiero decir es que puedo cantar con un cantante de ópera o con quien sea y no tengo que avergonzarme porque mi voz se quede muy corta en comparación con la de ellos. Yo siempre estoy firme.

— Fuiste uno de los primeros cantantes en hacer una carrera cantando en español y otra en paralelo cantando en inglés. ¿Te sientes un pionero en ese terreno? Lo que pasa es que crecí en Estados Unidos. El primer sello que me firmó fue RCA Victor, como cantante estadounidense. Pero en 1966 insistí en grabar en español y por eso se crearon dos carreras. Muchos cantantes latinos han intentado hacer lo mismo, pero a veces no lo logran porque no se criaron en Estados Unidos y no conocen la música de allá.

— Uno de tus éxitos más importantes en español es “La copa rota”. ¿La sigues incluyendo en tu repertorio? Claro. La copa rota fue una idea de un señor en Venezuela que manejaba la RCA Victor en ese tiempo. Él me dijo que yo tenía que grabar ese tema. Lo grabamos el año 70 en Venezuela y el resto es historia.

— ¿Finalmente, de dónde crees que salió ese estilo de tocar guitarra que tienes? Todo el mundo se moldea por lo que oye. Yo escuchaba guitarristas como Andrés Segovia, pues quería ser un guitarrista clásico. En la guitarra electrónica me gustaban Jimi Hendrix y Van Halen.