Sasha Grey llega a Lima: "Siempre quise hacer cosas distintas"
Sasha Grey llega a Lima: "Siempre quise hacer cosas distintas"
Santiago Bullard

Alguna vez se llamó Marina Ann Hantzis, pero ese nombre cayó muy pronto en el olvido. Más exactamente en el 2006, cuando grabó su primera escena para una película pornográfica. Su título era “The Fashionistas Safado: The Challenge”, y su iniciación en la industria fue una orgía con el ‘Semental Italiano’, Rocco Siffredi. Para cuando el rodaje terminó, esa joven de 18 años ya había asumido la identidad de .

El primer gran ícono del cine para adultos en su generación, ella fue al nuevo milenio lo que Jenna Jameson había sido para la década del noventa, y su carrera en la industria fue un éxito absoluto. Por eso, el mundo entero se sorprendió cuando anunció, cinco años después de su debut, que abandonaba la pornografía.

“Siempre quise hacer muchas cosas distintas y experimentar otros aspectos de mi propia creatividad”. Su voz, del otro lado de la línea, es profunda y melodiosa. Habla con desenfado. Ríe a menudo. Tiene 28 años: una década ha transcurrido desde su debut en el porno, y el mundo entero ya ha sido testigo de lo que muchos asumen que fue su metamorfosis: DJ, actriz no convencional en películas convencionales, escritora de novelas eróticas, militante por la igualdad de los derechos de las mujeres, defensora de la educación pública.

Pero nunca hubo tal transformación. Su figura siempre fue la de una mujer de muchas facetas, con ambiciones intelectuales. Antes de dejar la industria, ya era una asidua lectora de autores como Sartre o Dostoievski. También fue en esos años que empezó su carrera musical.

“En ese entonces, la música me pareció una buena forma de explorar mis facultades creativas, y por eso me uní a Pablo St. Francis para formar la banda aTelecine en el 2008”. Mientras habla, pienso en el contexto: ese mismo año, ella se convirtió en la actriz más joven en recibir el galardón a la Mejor Intérprete del Año en los premios AVN de la industria pornográfica.

“Dejé la banda en el 2013”, continúa ella, “y desde entonces he estado buscando un sonido propio. No solo me refiero a hacer mezclas de house. Para mí es importante poder escribir mi propio material”. Le pregunto acerca de su interés por el prog house. “Bueno, siempre me ha gustado el rock progresivo. Crecí escuchando a las bandas clásicas, y todavía sigo explorando ese mundo. Hace un par de años, por ejemplo, descubrí a una banda italiana llamada Premiata Forneria Marconi, que es extraordinaria”.

Esta sed constante de nuevas experiencias estéticas es en buena medida lo que hizo de Sasha Grey un ícono de la cultura popular. Dentro y fuera de la industria pornográfica, la transgresión siempre fue uno de sus sellos, así como un camino a seguir para distinguirse del resto. “En eso”, le digo, “eres un poco como Dita von Teese”. Su respuesta no se hace esperar: “La admiro muchísimo. He ido a ver sus shows cuatro veces, y creo que es muy grande, como artista y como ícono”.

También su primera novela, “La sociedad Juliette”, refleja su vocación de intelectual. Más allá del erotismo y el sudor, muy presentes en la obra, sus páginas ofrecen una reflexión sobre los neblinosos límites que existen entre la realidad y la fantasía. Al mismo tiempo, se trata de una declaración de amor al cine. “Hace no mucho terminé de escribir mi segundo libro. Se titula ‘La cámara de Janice’, y es una secuela del primero”, comenta.

ENEMIGO EN EL ESPEJO
Sasha Grey, sin embargo, debe lidiar a diario con un enemigo difícil de derrotar: el peso de su propia leyenda. Aunque es una firme defensora de la industria del porno, el haber sido una de sus mayores estrellas también es una etiqueta. “De hecho”, le digo, “podría decirse que estás en un momento crítico de tu carrera en el que debes superar tu propia imagen”.

“Soy plenamente consciente de eso”, responde. “La verdad es que para mí siempre ha sido muy difícil conseguir que la gente me vea como algo más que una ex actriz porno”. Sin complejos, con perfecta naturalidad, ella reconoce que buena parte de la atención que recibe se debe a su paso por esa industria. “Es por eso que los papeles que quieren que haga en el cine comercial tienen algo que ver con el sexo. Pero doy todo lo que tengo en cada uno de mis proyectos, y creo que ese es el mejor y único camino que puedo seguir”. 

EN LIMA
Ex estrella del porno, Sasha Grey es una artista de múltiples y complejas facetas. Este miércoles por la noche se presentará como DJ en Lima.

Sasha Grey llegará a Lima para presentarse como DJ este miércoles por la noche en la discoteca Céntrica (Av. Garcilaso de la Vega 1337, Centro de Lima), a las 9 p.m.

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