Brooke Shields empezó a actuar desde muy joven y, anteriormente, ha criticado la sexualización de la que fue víctima por parte de la industria del cine y los medios de comunicación, incluso siendo menor de edad. Sin embargo, su más reciente proyecto, “Pretty Baby: Brooke Shields”, dio a conocer algo que nadie imaginaba.
La actriz estadounidense es conocida por haber interpretado a una prostituta infantil en “Pretty Baby” (1978) a los 11 años y, siendo aún una adolescente, protagonizando “La laguna azul” (1980) donde hubo varias escenas de desnudos y sexo.
El pasado viernes 20 de enero, la intérprete estrenó el documental “Pretty Baby: Brooke Shields” en el Festival de Cine de Sundace, donde desmenuza la obsesión de Hollywood y programas de televisión por sexualizarla desde que era una niña.
LA REVELACIÓN QUE HIZO BROOKE SHIELDS EN SU DOCUMENTAL
Dentro del documental de dos partes que pronto se estrenará en Hulu, Brooke Shields reveló que no solo fue víctima de sexualización desde joven, sino que también fue violada. La propia actriz, quien ahora tiene 57 años, explicó cómo fue el terrible hecho que tuvo que vivir poco después de graduarse de Princeton.
Según cuenta, ella se había reunido para cenar con su presunto agresor pues iban a conversar temas de trabajo. Al final, ambos regresaron al hotel, donde pedirían un taxi para que ella pudiera volver a casa, pero eso no fue lo que sucedió.
“La puerta se abrió y la persona salió desnuda”, empezó a relatar. “Así de simple, fue como lucha libre. Tenía miedo de que me ahorcara o algo por el estilo, así que no peleé tanto, no lo hice, solo me congelé por completo”.
Shields afirma que le dijo que se detuviera, pero el hombre no prestó atención a su pedido y ella temía que se pusiera violento.
“Un solo ‘no’ debió haber sido suficiente, pensé ‘mantente viva y huye’ y solo lo bloquee. Dios sabe que sé cómo disociar de mi cuerpo. Bajé por el elevador, conseguí un taxi y solo lloré todo el camino al apartamento de mi amiga”, finalizó.
¿QUIÉN FUE EL AGRESOR DE BROOKE SHIELDS?
Aunque Brooke Shields decidió no revelar la identidad de la persona que abusó sexualmente de ella, dado que su cena previa al crimen fue con propósito de una posible película en la que podría participar, podemos asumir que se trataba de alguien relacionado a la industria: un productor, ejecutivo, director, actor o representante.
La actriz reveló que le contó lo sucedido al especialista en seguridad que trabajaba con ella, Gavin de Becker, quien le confirmó que lo que había vivido fue una violación, pero ella no podía creerlo.
En su momento, ella creyó que, de alguna forma, lo ocurrido había sido culpa suya. Sin embargo, cabe resaltar que las víctimas de violencia sexual nunca son las responsables.
“Eso fue lo que le tuve que hacer a mi cerebro. Él me dijo: ‘Puedo confiar en ti y no puedo confiar en las personas’. Es tan cliché que es prácticamente patético. Creí de alguna manera que envié un mensaje y así fue como se recibió el mensaje. Bebí vino en la cena. Subí a la habitación. Estaba tan confiada”, explicó.
EL MENSAJE QUE BROOKE SHIELDS LE ENVIÓ A SU AGRESOR
Posteriormente, Brooke Shields habló respecto a lo que decidió hacer con su agresor. Aunque no fue con la justicia, optó por escribirle una carta en donde le dijo todo lo que sentía, incluyendo que había destruido una “gran confianza” en él. No obstante, el mensaje fue desestimado.
“Simplemente levanté las manos y dije: ‘Sabes qué, me niego a ser una víctima porque esto es algo que sucede sin importar quién eres y sin importar para qué creas que estás preparado o no’”, concluye. “Quería borrar todo el asunto de mi mente y cuerpo y seguir en el camino en el que estaba. El sistema nunca había venido a ayudarme. Así que solo tenía que fortalecerme por mi cuenta”.