Gloria Estefan regresa después de siete años sin publicar un disco y lo hace desde el ritmo brasileño, en honor a este país y agradecida por poder seguir cantando: “la música me salvó. Es un privilegio y un honor que otras personas escuchen mi música y lo seguiré haciendo hasta el día que no pueda cantar”, dijo en entrevista con Efe.
“Cuando hay amor” es el primer sencillo que ve la luz del próximo álbum de la artista cubana, quien después de siete años -una pausa también influenciada por el fallecimiento de su madre en 2017- vuelve a alegrar a sus seguidores con su música en una época compleja a nivel mundial por la pandemia del coronavirus.
Aunque aseguró en entrevista no sentirse nerviosa, confesó estar muy emocionada de volver al ruedo con todas las ganas y con un disco totalmente dedicado a Brasil, país que comparte mucha cultura musical con su Cuba natal y a cuya música le hace un gran homenaje.
Contó que cuando era apenas una niña, la música le ayudó a atravesar momentos difíciles en los que tuvo que cuidar a su padre -tenía esclerosis múltiple-. “Llegaba de la escuela y me encerraba a aprender canciones con la guitarra y llorar para que mi madre no me viera mal y poder soltar toda esa emoción. Quería lucir fuerte”, detalló.
El “privilegio” de hacer música
Por ello, para la artista, que es una de las cantantes más reconocidas a nivel mundial, es un “privilegio” poder ofrecer su arte a sus seguidores, con quienes está muy agradecida, especialmente desde el accidente que sufrió hace 30 años en el que casi pierde la vida, momento en el que, aseguró, sintió las oraciones “de manera física” provenientes de todo el mundo.
Y es ahora, cuando el mundo pasa por una compleja situación, que llega nueva música de Estefan, característica por cantar a la alegría y al amor.
“Este (‘Cuando hay amor’) es uno de los cuatro temas inéditos del disco. Mayormente van a ser éxitos que ya conocen pero totalmente en ritmo brasilero. (...) Es como, si yo hubiese nacido en Brasil ¿cómo sería mi música?”, explicó la cantante afincada en Estados Unidos.
El disco lleva cocinándose cuatro años y fue grabado casi completamente en Brasil, con productores y arreglistas brasileños. Cuando a Estefan le llegó la propuesta, no dudó en embarcarse en el proyecto, ya que toda su vida fue admiradora de muchos músicos brasileños y ya en otras ocasiones ha homenajeado esta cultura que, aseguró, guarda una gran relación con la cultura cubana.
“Soy música y amante de la música, mi madre tenia gusto muy ecléctico me crió escuchando música no solamente de Estados Unidos, sino también de clásicos de Cuba y también de Brasil. Desde niña yo tenia ese amor por la música brasilera, es compleja e increíblemente sensual”, contó.
Un icono con mucho camino por recorrer
Y con este disco Estefan suma catorce discos de estudio, la mayoría de ellos alabados por la crítica y, sobre todo, abrazados por el público que, desde que inició su carrera musical a finales de la década de 1970 cuando estaba a punto de irse a estudiar a la Sorbona de París, siempre ha llenado estadios y comprado discos en todo lo largo y ancho del mundo.
Por lo anterior, la cantante es un icono de la música latina que, junto a otros como Carlos Santana o Juan Luis Guerra, impulsó este género que ahora engloba a muchos de los artistas más escuchados del momento.
“Cada vez que alguien abre la puerta un poquito más, ayuda a pasar al que viene por detrás. (Carlos) Santana y (José) Feliciano eran mi ejemplo. Para mí ha sido un reto y muy lindo poder estrechar la mano y ayudar a otros artistas latinos a llegar a internacionalizarse”, dijo la cantante.
Y también tuvo palabras de agradecimiento para el productor Emilio Estefan, su marido, junto a quien trabaja desde hace varias décadas.
“Somos un ‘team’ muy bueno. Todo artista que trabaja con él se queda feliz e impresionado porque él sabe brindarle a cada uno lo mejor de él y es sumamente organizado y motivador. Lo admiro muchísimo y siempre estaré trabajando con él en todo momento”, finalizó.