Danna García no ha tenido un año sencillo. En marzo, la actriz de “Pasión de gavilanes” fue diagnosticada con coronavirus (COVID-19) y pasó casi tres meses alejada de su familia pues no lograba recuperarse.
Siete meses han pasado desde que pudo reencontrarse con su familia y aún así la actriz colombiana lidia con las secuelas que le dejo la enfermedad.
En una entrevista a la revista Vea, García contó como su vida cambió tras sufrir por mucho tiempo dicho mal. “Se te va la memoria. Mi marido me hace tareas, me dice ‘apréndete todos los días, unos versos de un poema, y luego yo te los pregunto’. Me ha servido mucho, porque para grabar necesito buena memoria”, contó.
Pero la falta de memoria no es lo único que ha afectado a García, ya que tuvo episodios de vértigo que la pusieron en peligro. “Me caí con mi niño alzado, me fui de cara. Estás sentado en la silla y sientes que las a atravesar. Me duró mucho tiempo (esa sensación)”, agregó.
Además, la colombiana señaló que otras de las secuelas que sufre es la caída del cabello y la resequedad extrema en su cuerpo.
Cabe recordar que García contó que antes de dar positivo al coronavirus tuvo dengue y sus pulmones se vieron afectados tras presentar los primeros síntomas del COVID-19.
“Las secuelas del virus son cosas que uno carga, no sabemos por cuanto tiempo, y yo creo que la parte emocional es muy importante para quienes hemos estado enfermos, o para familias que tienen personas en esas condiciones”, concluyó.