Miguel Ángel Silvestre y Lali Expósito protagonizan la serie 'Sky rojo' de Netflix. (Foto: @elhormiguero / Instagram)
Miguel Ángel Silvestre y Lali Expósito protagonizan la serie 'Sky rojo' de Netflix. (Foto: @elhormiguero / Instagram)
Agencia Europa Press

La mayoría de seguidores de Miguel Ángel Silvestre desearían tener una cámara las 24h en la casa del actor, ver lo que hace, qué actividades lleva a cabo, qué series ve, cómo come... y sobre todo: cómo duermo. Gracias a ‘El Hormiguero’ no nos ha hecho falta averiguar de qué manera descansa uno de los actores más atractivos del panorama internacional.

MÁS INFORMACIÓN: “Sky Rojo”: fecha de estreno en Netflix, tráiler, historia, actores, personajes y todo sobre la serie española

Con esa labia que le caracteriza, el actor ha desvelado para Pablo Motos en exclusiva que duerme con los calzoncillo subidos por encima de un camiseta ancha para que no le entre aire por ninguna parte de su cuerpo... Y es que se nos hace difícil imaginar cómo Miguel Ángel se prepara para acostarse, ya que como bien decimos, muchos y muchas desearían pasar con el una bonita velada nocturna.

“Si me entra aire por los riñones me despierto, no puedo. Entonces los calzoncillos muy subidos y selladito” le confesaba al presentador y explicaba que duerme: “Con los calzoncillos subidos por encima de la camiseta”. Aunque no todo se ha quedado ahí porque el actor ha desvelado también que en muchas ocasiones se despierta a media noche gritando: “Me levanto y gritó ‘quién hay ahí, quién es’ y luego tardo un segundo en dormirme, pero la persona que está al lado...”.

Miguel Ángel Silvestre no ha ido solo, acompañado de , los dos han hablado de cuando la prensa extranjera aseguró que habían mantenido un romance, algo que ha desmentido el actor y ha asegurado que ojalá hubiese pasado: “La fantasía mía, sí. Yo llegaba enfadado porque eso es lo que decía la prensa, luego yo... En redes sociales me decían de todo ‘cuidado, no te pases ni un pelo’ Muchas veces pienso y hablo a mi representante o a mi madre para ver qué hacemos o qué decimos y ambas me dicen que el mundo es más importante. Pero aquí te digo que ¡ojalá!”.