Los dolores de garganta suelen ser comunes, pero en ocasiones pueden ser señal de algo más grave. En Inglaterra, un futbolista amateur de tan solo 20 años falleció una semana después de que le recetaran antibióticas para una amigdalitis. El joven falleció a causa de una infección bacteriana.
Luke Abrahams, natural de East Hunsbury, Inglaterra, tenía 20 años y mantenía una vida saludable. Jugaba como futbolista amateur y trabajaba como ingeniero ferroviario. Sin embargo, a partir de enero de este año empezó a sentirse mal de salud.
De acuerdo con Independent, el joven se quejaba de un dolor de garganta y acudió al Penvale Medical Center. Su médico de cabecera le recetó medicamentos para la amigdalitis, pero no mejoró y se extendió al glúteo izquierdo, lo que le imposibilitó levantarse de la cama.
Falleció a causa de una infección bacteriana
El joven pidió a sus padres Richard Abrahams (60) y Julie Needham (49) que llamara a una ambulancia, una semana después de su primera visita al hospital. Sin embargo, sus llamadas no fueron atendidas y los padres de Luke lo llevaron al nosocomio el 22 de enero. Después de revisarlo y practicarle más pruebas, el joven volvió a su casa, pero en la madrugada lo llevaron de vuelta al nosocomio
“Los médicos dijeron que está muy mal, que tiene esta infección bacteriana y que es una situación que pone en peligro la vida”, recordó Needham a los medios locales.
Luke Abrahams fue sometido a una delicada operación y tuvieron que amputarle una de sus piernas para tratar de salvarle la vida. Antes de la intervención, llamó a su padre para despedirse. “Papá, estaré bien, cuida de Jake y mamá”, fue su mensaje, según su padre Richard.
El futbolista amateur había padecido de una septicemia, síndrome de Lemierre (SL) que es una complicación rara pero potencialmente grave de la amigdalitis aguda, de acuerdo con una autopsia.
Los padres de Luke exigieron que las autoridades del hospital asuman sus responsabilidades.
“Cuando primero fue a los médicos y luego comenzó a quejarse de un dolor en la pierna, debería haberle hecho más pruebas”, dijo Richard Abrahams.