Panda salió de su hogar en Rochester, Washington (Estados Unidos), el pasado 13 de octubre, a dar uno de sus rutinarios paseos por el vecindario. Sin embargo, pasaron las horas y nunca más volvió. Tras una intensa búsqueda por parte de sus dueños, Christina y Josh Clevenger, el pequeño felino apareció en un pueblo alejado de Alaska. Esta es su extraña y emotiva historia que se volvió viral en redes sociales.
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Desesperados por no encontrarlo, sus dueños difundieron en Facebook las fotos del adorable Panda junto a un mensaje en el que pedían a los usuarios ayuda para localizarlo. 9 días después de su desaparición, el felino fue hallado hambriento y desconcertado en una caja de encomiendas en Kenai, en el estado de Alaska.
El empleado que encontró al felino publicó sus fotos en un grupo de mascotas perdidas, y fue así como a través de las redes sociales se corrió la voz y llegó hasta los dueños de Panda. “Cómo llegó a Alaska, no tenemos ni idea, pero lo que es más importante, cómo vamos a recuperarlo”.
El reencuentro del gatito y sus dueños fue gestionado por United Angels, una organización sin fines de lucro con sede en Washington. Esta ONG recaudó dinero para conseguir el regreso de Panda a su hogar, incluidos los costos de su vuelo desde Anchorage y demás gastos veterinarios.
Sin embargo, Christina y Josh Clevenger también están muy agradecidos con el empleado que encontró a Panda, pues fue él quien llevó al gatito al Hospital Veterinario de Kenai para conseguir el certificado de salud y pueda viajar sin problemas.
Tras una larga espera, Panda fue recibido por sus dueños en el aeropuerto de Seattle en Washington. ¿Pero como llegó a Alaska? Pues Christian cree que el gatito podría haberse subido a un camión de correo y permanecer allí durante 9 días. Sus pequeñas vacaciones forzadas servirán para que sus dueños tengan más cuidado y le impidan a Panda dar sus pequeños paseos rutinarios.