Cuando Adam Thwaites y su esposa Liz anunciaron que iban a ofrecer como premio mayor su casa en una rifa en el Reino Unido en la que el boleto costará el precio simbólico de 1 libra para apoyar una buena causa (1.33 dólares estadounidenses al tipo de cambio actual) no tenían idea cómo iban a reaccionar sus familiares y amigos.
En una columna publicada en el diario británico Mirror, Adam cuenta que tanto él como su cónyuge han estado pensando vender su vivienda para mudarse a otra más cerca de su familia, sus centros de trabajo y la guardería a la que asiste su hija Emily, pero que siempre terminaban desanimándose al ver lo feroces que eran las competiciones dentro del mercado inmobiliario.
Sin embargo, aquello solo fue el aliciente que necesitaron para llevar a cabo un anhelo personal que es el de recolectar fondos para la caridad. “Liz trabaja en Grace House, una organización benéfica que ofrece breves descansos para niños con discapacidad, y un día estuve hablando con el Gerente Registrado sobre su necesidad de un columpio accesible para sillas de ruedas”, precisó.
Lo que motivó a la familia a rifar su casa
En su texto, Adam contó que a su hija Emily le gusta tanto columpiarse en el parque que se puso triste al ver que “no todos tenían la oportunidad de usarlos”, pero descubrió que estos columpios cuestan alrededor de las 13,000 libras (unos 17,291 dólares), por lo que se le ocurrió una magnífica idea para poder concretar su objetivo de mudarse a otro lugar y ayudar a los más necesitados al mismo tiempo.
“Liz y yo decidimos que debíamos animarnos e intentar rifar nuestro hogar, permitiéndonos mudarnos, dejar que alguien gane un sorprendente premio justo para Navidad y recolectar fondos para Grace House”, precisó el padre de familia al referirse a la noble misión de la organización benéfica que apunta a enriquecer las vidas de niños con discapacidad, así como a sus respectivas familias.
Grace House se encarga de ofrecerle breves periodos de descanso cerca a sus residencias a estos menores así como consejerías, actividades familiares, grupos juveniles, entre otras cosas. “Nuestra hermosa casa en South Tyneside tiene tres habitaciones, dos pisos y un jardín. Está cerca de un enorme parque y a solo 8 minutos en auto de la playa. Y no tendrás que pagar ninguna tarifa de propiedad de transporte porque ya está cubierto”, precisó.
Una noble causa que merece ser apoyada
“Si vendemos 200,000 boletos de la rifa, un afortunado ganador despertará el día de Navidad con las escrituras de nuestra casa. Y Grace House recibirá un donativo de 50,000 libras para ese columpio especial que necesitan”, se lee en el texto de Adam, al tiempo que su esposa intervino y opinó que es una “locura” que uno rife su casa en vez de venderla “de la forma convencional”.
“Adam me convenció de que sería una buena idea. Era muy importante para nosotros que hagamos algo especial con el dinero extra que podamos obtener. Trabajando en Grace House vi hacia dónde va el dinero que reciben y con esa suma podemos hacer mucho por ellos”, señaló por su parte Liz, recalcando que el columpio para los niños con discapacidad ha sido siempre un ítem pendiente.
“Un columpio accesible para silla de ruedas ha figurado en nuestra lista de deseos desde hace mucho, pero como es muy costoso parecía inalcanzable, pero esta vez podemos darle un intento y obtenerlo para los niños”, finalizó la esposa de Adam, quien invitó a las personas a participar en la rifa solidaria para convertirse por solo una libra en el afortunado en vivir en una casa valorizada en más de 266,000 dólares y con una historia muy particular.