Uno de los mejores planes de fin de semana es preparar una carnita asada o asado para reunir a toda la familia y amigos en la casa. La tradicional barbacoa es un clásico en Estados Unidos, más aún en los días de verano; sin embargo, realizarla no es tan sencillo como poner el alimento sobre la parrilla, sino que hay que tener ciertos cuidados, sobre todo con la limpieza. Aquí te dejo información valiosa de por qué es un gran error usar un cepillo metálico o de alambre para dejarla impecable.
En territorio norteamericano existen los ahumados del sur (Texas, Memphis, Kansas y Carolina del Norte, entre otros), de cocción lenta, con la fuente de calor separada de la carne; y los steakhouses y barbacoas urbanas, donde la carne se cocina sobre el fuego. Estas opciones de gastronomía americana tienen a la vaca y cerdo como ingredientes principales que se marinan antes de cocinarse a bajas temperaturas para que se logre un ahumado, así como derretir el colágeno para hacerla más tierna y jugosa.
Para lograrlo, un factor importante es que el asador esté sin residuos de preparaciones anteriores, aunque hay quienes afirman que los dejan para que se adhieran para darle más sabor; sin embargo, lo mejor es limpiar muy bien la parrilla, pero no usar cepillos metálicos.
Cuidado con los cepillos de alambre antes de limpiar la parrilla
Navegando en TikTok me topé con el video del médico Raúl Martínez Vite quien desde su cuenta @sleeplab.mx alertó que este verano su inbox se empezó a llenar con la misma pregunta, pues muchos usuarios sintieron que habían tragado accidentalmente una fibra y terminaron en el hospital, ¿por qué?
Los accidentes durante la ‘carne asada’ o barbacoa no pasan solo por un atragantamiento o intoxicación, sino porque antes de preparar la comida se limpió la parrilla usando un cepillo de cerdas metálicas o cepillo de alambre. Y es que al hacer fuerza para quitar la grasa pegada, este utensilio puede perder poco a poco los pequeños alambres y estos terminar en tu esófago, enquistarse en alguna de las zonas de la vía respiratoria, provocarte inconvenientes médicos o infecciones y hasta llegar a los intestinos y producir una perforación.
Las emergencias por lesiones causadas por la ingestión de cerdas de alambre de cepillos de parrilla son constantes en Estados Unidos, por lo que los médicos hacen un llamado para evitar usar este método tan común en muchos hogares o asegurarse de que ninguna cerda del cepillo se haya desprendido antes de colocar las carnes.
Descubre la mejor forma para limpiar el asador
Si te preguntas entonces, cómo se debe limpiar la parrilla, aquí te comparto los consejos de Raúl Martínez Vite. “Mucha gente me está preguntando que cómo es que los otorrinos limpiamos nuestros asadores. Lo ideal es cambiarlo por un cepillo de alambre continuo donde no se van a desprender las fibras. Les recomiendo dejar limpia la parrilla al terminar de hacer el asado mientras aún está caliente”, explicó.
Sabiendo que lo más recomendable es quitarle la grasa y la mugre que se le puede pegar después de cada uso, puedes usar estos trucos caseros para conseguirlo.
- Usa cebolla o limón: cuando termines de cocinar, aprovecha que aún está caliente para pasar media cebolla para limpiar y desinfectar tu parrilla, ya que tiene un fuerte poder antibacterial y desengrasante. Frota la cara de esta verdura contra las rejilla. Al terminar pasa un trapo para limpiar los residuos y también puedes usar un limón que deja un olor agradable.
- Usa bicarbonato de sodio: mezclar un poco de zumo de limón con este polvo blanco muy utilizado en la limpieza del hogar. Remoja un trapo en ella y pásalo por la parrilla.
¿Este truco casero te pareció interesante y aprendiste un poco más sobre la limpieza y el cuidado de tu hogar sin invertir mucho dinero? Como este ‘hack’, hay otro tipo de utilitarios que serán de tu agrado. Te invitamos a conocerlos y ponerlos en práctica. Para ello, solo tienes que entrar en el siguiente enlace para más trucos caseros en Mag, y listo. ¿Te animas?
Cómo limpiar a fondo las rejillas de la parrilla
Remoja unos cuantos paños viejos de cocina en una mezcla de agua caliente y jabón de trastes. Limpia todas las áreas de la parrilla y luego rocía la parte superior interior de la parrilla con una solución de 1/3 vinagre a 2/3 agua. Deja reposar por lo menos media hora, y luego limpia el interior y el exterior de la parrilla con agua tibia para eliminar cualquier residuo de carbón, suciedad o insectos que hayan quedado atrapados.
Cada cuánto hay que limpiar una parrilla
El mantenimiento de la parrilla es fundamental si quieres que dure más tiempo. Si la mantienes limpia tras cada uso, es posible que no tengas que recurrir a los métodos de limpieza más profundos. Según Cleanipedia, lo recomendable es limpiarla cada cuatro meses aproximadamente, aunque si su uso es bastante recurrente quizás sería recomendable limpiarla cada dos o tres meses.
Cómo proteger la parrilla
Uno de los trucos para cuidarla mientras no le estemoa dando uso es cubrirla con una funda de protección para parrillas, que protegen del frío y de los días lluviosos, así como de la humedad. De esta forma, habremos conseguido tener la barbacoa en mejores condiciones, protegiéndola de la formación de óxido, y asegurando un buen funcionamiento, ya sean a base de carbón o de gas.