Las relaciones de pareja son uno de los pilares más importantes en la vida de muchas personas. Además de brindarnos apoyo, nos dan un sentido de pertenencia. Sin embargo, existen ciertas frases que, aunque parecen inofensivas, pueden ir desgastando poco a poco la relación sin que nos demos cuenta. Los expertos en psicología dicen que muchas de estas frases son características de relaciones codependientes, donde la necesidad de agradar y mantener la paz puede causar una comunicación poco saludable.
Frases que las personas que tienen relaciones saludables no dicen
A continuación en Mag, te revelaré 9 frases que deberíamos evitar para fortalecer nuestras relaciones y fomentar un vínculo interdependiente y saludable.
1. “No necesito nada”
Esta frase puede parecer una forma de evitar conflictos o demostrar autosuficiencia, pero en realidad oculta nuestras verdaderas necesidades. En relaciones codependientes, las personas tienden a ignorar o minimizar sus propios deseos, centrándose únicamente en satisfacer a su pareja. Este comportamiento de autosacrificio puede parecer noble, pero a la larga crea resentimiento y desconexión emocional.
Una relación interdependiente se basa en que ambas personas se sientan apoyadas y valoradas. Expresar nuestras necesidades y deseos fortalece el vínculo y permite que ambos miembros de la pareja se sientan completos dentro de la relación.
2. “Todo está bien”
Evitar conflictos puede parecer la mejor manera de mantener la paz, pero decir constantemente que “todo está bien” cuando no lo está puede ser perjudicial. Las personas en relaciones codependientes suelen reprimir sus emociones para evitar discusiones, lo que puede llevar a conductas pasivo-agresivas o a un sentimiento de desapego.
Una comunicación honesta y abierta, aunque incómoda en el momento, ayuda a fortalecer la relación a largo plazo. Las parejas interdependientes comparten sus sentimientos y trabajan juntos para resolver los desacuerdos de manera respetuosa.
3. “No puedo decirte que no”
Decir “no” en una relación no debería ser motivo de culpa o miedo. Sin embargo, en relaciones codependientes, uno de los miembros suele sacrificar sus propios límites para evitar la desaprobación de la otra persona. Este comportamiento puede llevar a una pérdida de identidad y a sentimientos de frustración.
En una relación saludable, decir “no” y establecer límites no solo es aceptable, sino necesario. Ambos deben sentirse libres de expresar sus deseos sin miedo a represalias, sabiendo que la autenticidad fortalece la conexión.
4. “Mis sentimientos no son tan importantes”
Minimizar nuestros propios sentimientos para mantener la armonía puede parecer un gesto de amor, pero en realidad, envía el mensaje de que nuestras emociones no valen la pena ser escuchadas. En una relación codependiente, es común que uno de los miembros evite expresar sus verdaderos sentimientos por miedo al rechazo o al conflicto.
Las parejas interdependientes reconocen y validan sus emociones, tanto individualmente como en pareja. Compartir cómo nos sentimos nos permite ser auténticos y fomenta una comunicación sincera.
5. “¿Estás enojado(a) conmigo?”
La inseguridad y el miedo al rechazo son comunes en relaciones codependientes, lo que lleva a una constante búsqueda de aprobación y validación de la pareja. Preguntar repetidamente si la otra persona está molesta genera una dinámica de dependencia emocional poco saludable.
En una relación interdependiente, ambos miembros confían en su propio valor y no necesitan una validación constante. Expresan sus inseguridades de manera directa y se enfocan en construir una comunicación basada en el respeto mutuo.
6. “No puedo estar solo(a)”
El miedo a la soledad es uno de los signos más comunes de la codependencia. Las personas en estas relaciones suelen depender en exceso de su pareja para sentirse completas y seguras, lo que puede llevar a una relación asfixiante y a la pérdida de la individualidad.
Las relaciones interdependientes, por otro lado, valoran el tiempo a solas como una oportunidad para crecer y reforzar su identidad individual. Ambas personas se sienten completas por sí mismas y no dependen de la relación para sentirse realizadas.
7. “Nunca me dejes”
El temor al abandono es una constante en las relaciones codependientes. Este miedo puede llevar a comportamientos excesivamente complacientes o controladores en un intento desesperado por evitar que la pareja se marche.
En una relación saludable, la confianza y la seguridad se construyen a través de la comunicación y el respeto mutuo. Aunque el miedo a la pérdida siempre puede estar presente, las parejas interdependientes se enfocan en disfrutar del presente sin tratar de controlar el futuro.
8. “No soy lo suficientemente bueno(a)”
La baja autoestima y la búsqueda constante de validación externa son características de una relación codependiente. Esta falta de confianza en uno mismo puede llevar a críticas internas constantes y a una dependencia excesiva de la aprobación de la pareja.
Las parejas interdependientes reconocen sus propias inseguridades pero trabajan activamente para fortalecerse a nivel individual. Entienden que su valor no depende de la aprobación de los demás, sino de su propia autopercepción y crecimiento personal.
9. “¿Realmente me amas?”
Buscar confirmación constante del amor de la pareja puede parecer un gesto inocente, pero en realidad, refleja inseguridades profundas que pueden desgastar la relación. Este tipo de comportamiento es típico en relaciones codependientes, donde la necesidad de aprobación se vuelve una carga emocional para ambos.
En una relación interdependiente, el amor y la seguridad se comunican a través de acciones y palabras sinceras, sin necesidad de confirmaciones constantes. La confianza en la pareja y en uno mismo permite que ambos se sientan amados y seguros.
Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.