La semilla de moda. La chía han ganado popularidad por ser ricas en carbohidratos, fibra, vitaminas y minerales. Sin embargo, antes de consumirlas es necesario “activarla” y aquí te explicamos la manera más fácil de hacerlo.
Además de ser rica en proteínas, la chía tiene un alto contenido en fibra y contienen minerales como como calcio, cobre, hierro, magnesio, entre otros, según remarca Cuídate Plus.
Sin embargo, antes de usarla para el consumo es necesario activarla o remojarla con anterioridad. Los nutricionistas recomiendan emplear las semillas en el desayuno para una dieta saludable, aunque en pequeñas cantidades.
¿Cómo hidratar las semillas de chía?
Los ácidos grasos esenciales son necesarios para ciertas funciones del organismo y la chía puede ayudarnos para este fin. No obstante, para aprovechar este alimento se debe “activar”, según la nutricionista Estefanía Beltrami (@nutricion.salud.arg), muy popular por dar consejos y recetas saludables en TikTok.
En este caso, te explicaremos cómo hidratar las semillas de chía para que queden activadas.
- En un frasco mezcla las semillas de chía con yogur y deja reposar en la nevera toda la noche
- Una vez hidratadas, sirve al día siguiente en un plato y acompáñala con un poco de granola y rodajas de plátano.
¿Cuál es la mejor manera de remojar las semillas de chía?
Para remojar las semillas de chía, simplemente mézclalas en una proporción de 1:10 de chía y agua y déjalas reposar entre 30 minutos y dos horas. Esto equivale a aproximadamente una cucharada y media de semillas de chía en una taza de agua, y aunque no tiene que ser exacto, uno sí querrá que se gelifique por completo y que no quede demasiado acuoso.
¿Remojas las semillas de chía en agua tibia o fría?
El agua fría es la mejor opción para remojar las semillas de chía. A diferencia de muchos otros alimentos, no se necesita calor para descomponer y ablandar las semillas de chía. ¿La razón? Pueden absorber fácilmente el agua cuando está fría.
¿Qué pasa si no remojas las semillas de chía antes de comerlas?
Si comes semillas de chía secas, sin darles ningún líquido para que las absorban antes de ingerirlas, absorberán el agua dentro de tu sistema y potencialmente causarán un bloqueo.
Beneficios de las semillas de chía
La chía es una semilla especialmente rica en ácidos grasos omega-3 de origen vegetal, pero además los aporta junto a ácidos grasos omega-6 en la proporción ideal para el organismo. Es una buena fuente de minerales como el calcio, el magnesio y el boro. También posee un alto contenido de fibra, tanto soluble como insoluble, lo que nos ayuda a mantenernos saciados y a regular el tránsito intestinal.
A diferencia de otras semillas, la chía posee una gran cantidad de antioxidantes, que entre otras cosas previenen el enranciamiento de sus propias grasas, entre las que destacan sustancias como el ácido clorogénico, el ácido cafeico, la quercetina o el kaempferol.
De hecho, su potencial antioxidante, sus efectos beneficiosos en la diabetes, el colesterol o la hipertensión y sus propiedades antiinflamatorias y laxantes, entre otras, tienen respaldo científico, como lo indica una publicación en Journal of Food Science and Technology.
Por otra parte, las semillas de chía se catalogan dentro de las grasas buenas, favorecen al sistema cardiovascular y circulatorio, al mantener a raya los límites de colesterol en la sangre. Se ha demostrado que contienen un mayor índice de Omega 3, superando por mucho a las semillas de lino o el salmón.
