Todos sabemos que mantener nuestro lugar de descanso limpio es clave para dormir bien y sentirnos geniales. Pero, ¿cuántas veces a la semana deberíamos sacudir el polvo en nuestro dormitorio? ¡Aquí en MAG te contamos lo que necesitas saber para mantener tu espacio reluciente!
Factores que influyen en la frecuencia de limpieza
- Tus alergias y tolerancia al polvo: Si eres alérgico o sensible al polvo, es posible que necesites armarte con el plumero más a menudo, incluso cada día. ¡Tu comodidad y salud son lo primero!
- Ubicación con sazón: ¿Tu dormitorio está en una ciudad llena de humo y contaminación? ¡Entonces quizás necesites batallar contra el polvo con más frecuencia!
- ¿Desayunas en la cama? ¿O trabajas ahí?: Si haces muchas actividades en la cama, como comer o trabajar, más probabilidades hay de que tengas que pelear contra el polvo más a menudo.
- Mascotas en la casa: Tener mascotas que rondan por el dormitorio agrega pelo y polvo extra al juego. ¡Ten tu aspiradora lista!
La frecuencia con la que debes quitar el polvo de tu dormitorio
Aquí te dejamos un plan de batalla que podrías seguir para mantener ese polvo a raya y asegurar un ambiente agradable:
- Limpieza básica semanal: Dale al dormitorio una pasada con el plumero al menos una vez por semana. Limpia los muebles, estantes, y todo lo que acumule polvo.
- Limpiando con pasión mensualmente: Cada mes, dale un mimo adicional a tu dormitorio. Aspira la alfombra, sacude las cortinas y echa un vistazo bajo la cama.
- Presta atención especial: No olvides las cosas que pueden acumular polvo rápidamente, como los ventiladores de techo, calefacciones y aire acondicionado. Dales un vistazo y límpialos si es necesario.
Consejos extras
- Aire Fresco, ¡Por Favor! Abre las ventanas y deja que el aire circule. ¡Eso ayuda a que el polvo no se acumule tanto!
- ¡Filtros al Rescate! Piensa en instalar purificadores de aire o sistemas de filtración. ¡Son como superhéroes contra el polvo!
- Simplifica Tu Espacio: Cuantos menos objetos y muebles tengas, menos lugares tendrán para esconderse las partículas de polvo.
Así que, ¿cuántas veces debes quitar el polvo? ¡Depende de ti! Hazlo con la frecuencia que necesites para mantener tu lugar limpio y cómodo. ¡Asegúrate de dormir como un bebé en ese dormitorio impecable!
¿Este truco casero te pareció interesante y aprendiste un poco más sobre la limpieza y el cuidado de tu hogar sin invertir mucho dinero? Como este ‘hack’, hay otro tipo de utilitarios que serán de tu agrado. Te invitamos a conocerlos y ponerlos en práctica. Para ello, solo tienes que entrar en el siguiente enlace para más trucos caseros en Mag, y listo. ¿Te animas?
Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.