Hoy en Mag vamos a hablar de una tarea de limpieza que a veces olvidamos por completo: ¡los zócalos o rodapiés ! Sí, esas bandas horizontales hechas en su mayoría de madera y que están a lo largo de nuestras paredes y que, aunque a menudo pasan desapercibidas, merecen un poco de amor y atención. Así que, ¿estás listo para darle una limpieza a tus zócalos? Aquí te decimos cómo limpiarlos correctamente de manera sencilla.
Lo primero que debemos saber es por qué es importante mantener nuestros zócalos limpios. Bueno, aparte de que lucen mucho mejor cuando están libres de polvo y mugre, los zócalos también desempeñan un papel importante en la higiene de tu hogar. Cuando acumulan polvo y suciedad, pueden convertirse en criaderos de ácaros y alérgenos que no son buenos para la salud de tu familia.
Cómo limpiar los zócalos de madera
Limpiar los zócalos puede parecer una tarea pequeña, pero hace una gran diferencia en la apariencia y la higiene de tu hogar. Así que, ¡anímate y dale una limpieza a tus zócalos! ¡Tu casa te lo agradecerá!
¿Qué necesitas?
Antes de lanzarte a la limpieza, asegúrate de tener todo lo que necesitas. Aquí está la lista de supermercado para esta misión:
- Un trapo o paño limpio.
- Un balde de agua tibia.
- Jabón o detergente suave.
- Un cepillo suave o una esponja.
- Un poco de tiempo y paciencia.
¡Manos a la obra!
- Quita el polvo inicial. Lo primero que debes hacer es pasar un trapo o paño limpio por los zócalos para eliminar el polvo superficial. ¡Este paso es fácil!
- Prepara tu mezcla. Llena el balde con agua tibia y agrega un poco de jabón o detergente suave. No te pases con el detergente, un poco es suficiente.
- Humedece el paño. Moja el trapo en la mezcla de agua y jabón, escúrrelo bien para que no gotee y comienza a limpiar los zócalos. Puedes empezar desde arriba o desde abajo, como prefieras.
- Usa el cepillo o esponja. Si tienes manchas rebeldes o suciedad incrustada, utiliza el cepillo suave o la esponja para frotar suavemente. No te excedas en la presión, ¡no queremos arañar los zócalos!
- Enjuaga y seca. Después de limpiar, enjuaga el trapo en agua limpia y pásalo nuevamente por los zócalos para quitar cualquier residuo de jabón. Luego, sécalos con otro paño limpio.
Consejos adicionales
- Si tus zócalos son de madera, ten cuidado con la cantidad de agua que usas, ya que la madera no es fanática del exceso de humedad. Sécalos rápidamente.
- Puedes agregar unas gotas de vinagre blanco a tu mezcla de limpieza para un poder desinfectante adicional.
- No olvides las esquinas y las áreas detrás de los muebles. ¡El polvo se esconde en todas partes!
¿Este truco casero te pareció interesante y aprendiste un poco más sobre la limpieza y el cuidado de tu hogar sin invertir mucho dinero? Como este ‘hack’, hay otro tipo de utilitarios que serán de tu agrado. Te invitamos a conocerlos y ponerlos en práctica. Para ello, solo tienes que entrar en el siguiente enlace para más trucos caseros en Mag, y listo. ¿Te animas?
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Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.