Para muchas personas es muy incómodo escuchar que las patas de las sillas suenen mientras son arrastradas en el suelo. Aparte, estas se suelen dañar rápidamente y terminan desechándose en corto tiempo. ¿Qué hacer para evitas estos problemas? Conoce dos trucos caseros para que no vuelvas a pasar por esta mala experiencia.
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Las sillas son muebles que se encuentran en la mayoría de casas y, a pesar que tienen muchas ventajas, las personas deben lidiar con el ruido que hacen y los daños que ocasionan en el piso.
Por fortuna, el ingenio humano sorprende cada día y, para solucionar este problema, existen protectores que se pueden elaborar con elementos accesibles. Presta atención a estos trucos caseros provenientes de Información.
¿Cómo evitar que las patas de sillas rayen el piso?
Círculos de fieltro. Puedes conseguir este producto en ferreterías y tiendas de bricolaje para evitar que la madera del piso resulte dañada. Lo único que tienes que hacer es comprar círculos de fieltro y pegarlos a las patas por la parte adhesiva.
Puedes fabricarlo tú mismo al recortar el fieltro, siguiendo las medidas de las patas de las sillas.
Corcho. Utiliza los corchos de las botellas de vino para proteger las patas de las sillas. Corta el corcho en láminas de un dedo de grosor, muy similar a los círculos de fieltro.
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