Hay cosas que olvidamos limpiar en la cocina del hogar: una de ellas son los cubiertos. Tienen una vida útil larga, pero van perdiendo su brillo con el paso del tiempo, adquiriendo un aspecto opaco y manchas de óxido que pueden dar una mala impresión a las visitas. Y talvez te habrás preguntado en más de una ocasión cómo limpiarlos. Aquí te ofrecemos unos trucos caseros muy fáciles de hacer.
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Trucos para cubiertos de acero inoxidable:
- Mezclar un chorro de vinagre con tres tazas de agua en un recipiente.
- Humedecer un paño en la mezcla, asegurándonos de que quede húmedo.
- Frotar los cubiertos con el paño.
- Aclarar con agua los cubiertos y secar bien con un paño limpio.
En algunas restaurantes y hoteles hacen uso de ginebra para mantener el brillo de la cubertería de acero. Únicamente debe humedecerse un paño con la bebida y frotar los cubiertos con este.
Trucos para cubiertos de plata:
- Lavar los cubiertos con agua y jabón y secar.
- Añadir a un bowl dos cucharadas de bicarbonato de sodio y un poco de agua. Al mezclarlo debe quedar como pasta.
- Con un paño, frotar la pasta resultante en los cubiertos.
- Aclarar con agua y secar.
Al margen del material de los cubiertos, estos nunca deben guardarse húmedos. Y si queremos evitar que se rallen antes de tiempo deben almacenarse de forma adecuada.