Es cierto que muchos medicamentos ya son sintéticos, es decir, fabricados en el laboratorio en lugar de ser extraídos de la naturaleza, pero esto no siempre fue así. Cuando no existían, el único remedio que tenía el ser humano para paliar enfermedades era recurrir a la medicina natural, ya sea mediante plantas, frutas o verduras.
A pesar de que la medicina sigue evolucionando a pasos agigantados, todavía se sigue transmitiendo de generación en generación aquellos remedios caseros que tienen grandes resultados para tratar algunas enfermedades. Uno de ellos es el uso del tomate.
Sí, probablemente lo relaciones para condimentar comidas o en la preparación de alguna salsa, pero el tomate cuenta con grandes propiedades para la salud y aquí en MAG te decimos cómo sacarle provecho.
Usos del tomate fuera de la cocina
A continuación, te dejamos tres sorprendentes usos del tomate fuera de la cocina.
Picaduras de insectos
El tomate es un excelente calmante para aliviar el dolor y bajar la inflamación de las picaduras. El procedimiento es muy sencillo: coloca un par de rodajas frescas sobre las zonas infectada por unos minutos y eso será todo. Eso sí, se recomienda quitar el aguijón previamente.
Quemaduras de sol
El motivo por el que debes recurrir al tomate para las quemaduras de sol se debe a la presencia de licopeno. Es un potente antioxidante que, entre otras cosas, ayuda en la reconstrucción de la piel y a aliviar las molestias. El procedimiento es igual que las picaduras de insectos.
Resaca
¿Tuviste una noche de copas? Puedes tomar un buen vaso de jugo de tomate para tratar los síntomas de la resaca, ya que ayuda a eliminar el alcohol de nuestro sistema.
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