El propietario de un bar en Tenerife, España, contó la experiencia que tuvo con un par de clientes que, después de irse sin pagar la botella de vino y entradas que pidieron, cometieron un garrafal descuido: uno de ellos dejó en la mesa que ocuparon su moderno smartphone valorizado en mil euros (poco más de 1,210 dólares estadounidenses al tipo de cambio actual). Todos los detalles están en esta nota.
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“Una vez más dos chicas salieron corriendo sin pagar. No podemos permitir esto más, estamos cansados, la Hosteleria esta sufriendo mucho para que encima los clientes nos hagan esto. Parece que se pone de moda pero ahora les planteo una pregunta ¿Qué hago cuando vengan a buscar el móvil?”, preguntó en Facebook la página del restaurante llamado “Guachinche Como en Casa”.
En la publicación, el dueño adjuntó una foto de la cuenta a pagar y otra del teléfono encontrado. Mientras que algunos recomendaron denunciar a las chicas, e incluso vender el celular, se dio a conocer que el propietario del establecimiento pudo ponerse en contacto con la madre de la chica que había dejado el equipo.
Avergonzada, le dijo que irían al local a pagar la cuenta de 23,60 euros y a pedir disculpas. El dueño del local explicó que no iba a poner una denuncia, pero alertó a sus colegas a que estén atentos para que este tipo de situaciones no se repita.