Hay temores que interfieren decisivamente en nuestra vida y muchas veces no lo notamos o nos perturban en secreto. El ser humano está plagado de sensaciones, pero si hay una que casi todos prefieren darle la espalda, es el miedo. Si hay algo poderoso dentro de los ejercicios que juegan con nuestra lógica es que nos permiten profundizar en las emociones y empezar un proceso muy interesante de autoexploración. Sabiendo esto, hoy te animo a desarrollar este test de personalidad que elaboré y en el que te pido elegir el sendero que más llamó tu atención, ¿por qué? es que este test tiene el poder de revelarte cuál es tu mayor temor para que así puedas afrontarlo.
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Todos tenemos cosas que nos atemorizan como los insectos, los terremotos, el mar o las alturas y esos miedos nos acompañan a un nivel subconsciente; sin embargo, se pueden convertir en obstáculos en la vida debido a nuestra forma de ser, cómo gestionamos las emociones o interpretamos los acontecimientos. Pero si los descubrimos obtendremos una visión más clara acerca de las áreas que podrían limitando nuestro bienestar y así tomar decisiones más informadas y vivir una vida más satisfactoria.
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¿Te has parado a pensar qué miedo o temor está más presente en tu vida? Este test de personalidad te ayudará a conocerlo y para eso solo te pido que elijas el sendero que más te guste. Luego podrás revisar las respuestas al final de la nota. Es importante que recuerdes que este ejercicio solo debe ser visto con fines de entretenimiento y no tomado como una evaluación psicológica profunda. Ahora sí, ¿estás listo?
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¿Elegiste el sendero #1?
- Si elegiste el primer sendero, tu mayor temor es lo desconocido. Sientes una profunda inquietud hacia lo incierto y te preocupa el futuro, lo que puede llevarte a evitar situaciones que no puedes predecir o controlar. Este temor puede manifestarse en ansiedad sobre decisiones importantes o en preocupaciones sobre lo que podría salir mal. Te encuentras buscando seguridad y certeza en un entorno que a menudo es impredecible, lo que puede hacerte dudar de tus propias decisiones y temer lo inesperado. Para enfrentar este miedo, es útil trabajar en desarrollar una mayor tolerancia a la incertidumbre. Puedes comenzar por aceptar que no todo en la vida puede ser controlado y que la incertidumbre es una parte natural de la experiencia humana. Enfocarte en el presente y practicar la atención plena puede ayudarte a reducir la ansiedad y a encontrar paz en el aquí y el ahora. Además, establecer pequeñas metas alcanzables y celebrar tus logros puede ayudarte a construir confianza en tu capacidad para manejar lo desconocido.
¿Elegiste el sendero #2?
- Si elegiste el segundo sendero, tu mayor temor es el fracaso. Sientes una gran presión por alcanzar tus objetivos y temes no estar a la altura de tus propias expectativas o las de los demás. Este miedo puede llevarte a evitar riesgos y a dudar de tus capacidades, lo que a veces te impide tomar decisiones audaces o seguir nuevas oportunidades. Para superar este temor, es útil aprender a ver el fracaso como una oportunidad para el crecimiento personal. Cada error o contratiempo puede ofrecer valiosas lecciones y ayudarte a mejorar en el futuro. Reconocer y celebrar tus logros, incluso los más pequeños, te permite construir confianza en ti mismo y reforzar tu autoestima. Además, adoptar una mentalidad de crecimiento, en la que veas los desafíos como oportunidades para aprender y desarrollarte, puede ser muy beneficioso. Aceptar que el fracaso es una parte natural del proceso de aprendizaje y un paso hacia el éxito te permitirá enfrentar tus miedos con mayor valentía.
¿Elegiste el sendero #3?
- Si elegiste el tercer sendero, tu mayor temor es la pérdida de control. Tienes una fuerte necesidad de orden y previsibilidad en tu vida, y te inquieta no saber qué esperar o perder el rumbo. Este miedo puede llevarte a ser excesivamente cauteloso o a intentar controlar todos los aspectos de tu vida, lo que a veces puede generar estrés y agotamiento. Para manejar este temor, es útil trabajar en aceptar la flexibilidad y confiar en tu capacidad para adaptarte a los cambios. Reconocer que no todo en la vida puede ser predicho o controlado te ayudará a liberar parte de esa carga. Aprender a soltar un poco el control y aceptar la incertidumbre como una parte natural de la vida puede abrirte a nuevas oportunidades y experiencias. Además, establecer rutinas y prácticas que te brinden un sentido de estabilidad puede ayudarte a sentirte más seguro mientras enfrentas lo inesperado. Practicar técnicas de relajación y mindfulness puede ser beneficioso para mantener la calma en momentos de incertidumbre.
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Periodista. Licenciada en Periodismo por la USMP con más de 10 años de experiencia en periodismo televisivo, radial y digital para medios de comunicación líderes del país. Actualmente Coordinadora de Nuevas Audiencias en el Grupo El Comercio (Lima, Perú).