A pocos les gusta ser testigos de una pelea a puños, pero una pelea a puños a más de 7.000 metros de altura en la montaña más alta del mundo, es una experiencia espeluznante.
Así lo describió uno de los testigos que presenciaron el encuentro a puñetazos entre tres alpinistas europeos y sherpas (guías locales) cuando éstos ascendían la cumbre del Everest.
El testigo estadounidense, que habló bajo la condición de anonimato con la agencia de noticias AFP, señaló que dos de los involucrados eran famosos alpinistas europeos que han logrado récords internacionales y han escalado la montaña en repetidas ocasiones.
Según contó el estadounidense, el suizo Ueli Steck, y el italiano Simone Moro, estaban acercándose al campamento tres el sábado, ubicado a 7.470 metros de altura, cuando ocurrió la riña.
Aparentemente un grupo de guías nepaleses estaban montando unas cuerdas y pidieron a los alpinistas que esperaran mientras terminaban el arreglo.
Los europeos, que iban acompañados de un fotógrafo que registraría su intento de llegar a la cumbre de la montaña de 8,840 metros, ignoraron el pedido y siguieron el ascenso.
Los sherpas pidieron al equipo no escalar sobre ellos mientras estaban arreglando las cuerdas, pero éstos no hicieron caso dijo el testigo.
Entonces cayó un trozo de hielo y golpeó a los sherpas, lo cual los indignó agregó.
Se cuenta que horas más tarde una furiosa multitud de nepaleses irrumpieron en las tiendas de los alpinistas y les lanzaron piedras. Cuando los tres europeos salieron comenzó el encuentro a puñetazos.
INVESTIGACIÓN El portavoz del Departamento de Alpinismo de Nepal, Dipendra Poudel, confirmó que los tres alpinistas, de Italia, Suiza y Reino Unido, se vieron involucrados en el altercado con sherpas el domingo y que se estaban investigando los hechos.
Poudel agregó que ambas partes acusan a la otra de comenzar el incidente.
Por su parte Anish Gupta de la compañía basada en Katmandú, Cho-Oyu Trekking, que organizó la expedición, señaló que se nos dijo que nuestros clientes y los guías se involucraron en una pelea en su ascenso al campamento tres. No tenemos todos los detalles todavía, pero nuestros clientes ya descendieron de la cumbre.
Agregó que uno de los clientes, el alpinista suizo, descendió de la montaña y estaba esperando volar de regreso a Katmandú.
La batalla por conquistar la cumbre del Everest es un asunto cada vez más competido, aunque quizás esta es la primera vez que la lucha se resuelve a puñetazos.
Y es que cada año en abril y mayo cientos de personas acuden en tropel a los Himalayas para tratar de ascender la montaña más alta del mundo y cada vez el espacio para llegar a la cumbre es más reducido.
Sin los sherpas, que son los primeros que deben subir para colocar las cuerdas de las rutas, los europeos no podrían llevar a cabo sus aventuras.
El año pasado un reconocido alpinista le dijo a la BBC que el campamento base en el Everest estaba tan concurrido como el de cualquier otra cumbre que había visitado.