Amanda Berry, la joven madre que se hallaba secuestrada junto a Gina DeJesus y Michelle Knigh, secuestradas todas hace aproximadamente 10 años, hizo esta llamada entre el nerviosismo y los sollozos cuando había conseguido escapar de la casa de madera de Cleveland. Aquí la conversación, que refleja la tensión y sentimientos de Berry antes de ser rescatada junto con sus compañeras:

A.B.: ¡Ayúdenme, ayúdenme! Soy Amanda Berry.

- ¿Necesita a la Policía, a los bomberos o una ambulancia?

A.B.: Necesito a la Policía.

- OK, ¿Qué está pasando?

A.B.: He estado secuestrada y llevo desaparecida 10 años y estoy aquí ¡ahora soy libre!

- OK, ¿Cuál es su dirección?

A.B.: 2207 Seymour Avenue.

-Parece que me estás llamando desde 2210.

A.B.: Estoy en la acera de enfrente, estoy llamando por teléfono.

- OK. Quédese ahí con esos vecinos y hable con los agentes de la policía cuando lleguen.

A.B.: Ok. ¿Hola?

- Sí, hable con los agentes de la policía cuando lleguen

A.B.: OK. No quiero irme ahora mismo.

- Le enviaremos a alguien tan pronto como tengamos un auto listo.

A.B.: Necesito que vengan ahora, antes de que él vuelva.

- Muy bien, se lo mandamos ahora, ¿OK?

A.B.: OK

- ¿Quién es ese hombre que ha salido?

A.B.: Su nombre es Ariel Castro. Tiene como 52 años, y yo soy Amanda Berry. He estado en las noticias durante los últimos 10 años.

- Sí, lo he entendido, querida, ¿me puede repetir el nombre del hombre?

A.B.: Ariel Castro.

- ¿Como va vestido?

A.B.: No lo sé porque no está aquí ahora mismo.

- ¿Cómo iba vestido cuando salió?

A.B.: (Llanto)

- La policía está en camino, hable con ellos cuando lleguen.

A.B.: Muy bien, adiós.