La policía brasileña arrestó a dos hombres acusados de haber violado y robado a una turista extranjera el sábado en un microbús en Río de Janeiro y de haber agredido a su novio, informaron hoy fuentes oficiales.
Los dos sospechosos fueron detenidos anoche en la vecina ciudad de Sao Gonzalo pocas horas después de que la extranjera hiciera la denuncia, y reconocidos por las víctimas en la Comisaría Especial de Apoyo al Turista, informó la Policía Civil.
Los acusados fueron identificados como Jonathan Foudakis de Souza, de 20 años, y Wallace Aparecido Souza Silva, de 22 años, uno de los cuales conducía el vehículo de transporte público.
Según la denuncia de la turista, de la que no se conoce identidad ni nacionalidad, los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado cuando abordó con su novio un microbús que pasaba por el turístico barrio de Copacabana y que se dirigía al bohemio y céntrico barrio de Lapa.
TESTIGO DE LA AGRESIÓN Los dos hombres, según la policía, obligaron a los demás pasajeros a bajarse del microbús en el vecino barrio de Botafogo y siguieron con la pareja de extranjeros, mantenida como rehén durante seis horas, hacia la vecina ciudad de Niteroi, separada de Río de Janeiro por un puente de 14 kilómetros de extensión.
El novio de la víctima fue violentamente golpeado y esposado mientras que uno de los agresores violaba a la mujer en el propio vehículo.
Los dos acusados también se apoderaron de las tarjetas bancarias de los turistas, exigieron la revelación de las claves secretas e hicieron varias extracciones en cajeros a lo largo del recorrido.
Igualmente utilizaron las tarjetas de crédito para adquirir bebidas y abastecer el vehículo con gasolina.
Los dos turistas fueron abandonados sin pertenencias en Itaboraí, otro suburbio de Río de Janeiro, en donde pidieron ayuda a la policía.
Las informaciones suministradas por las víctimas sobre el microbús permitieron a la policía localizar rápidamente a su propietario y a la persona que había alquilado el vehículo para utilizarlo en el transporte público de pasajeros.
Uno de los hombres arrestados tenía en su poder el teléfono celular de una de las víctimas, según la policía.