El Ministerio del Interior de Bulgaria confirmó hoy que los padres de María, la niña rubia hallada en un campamento gitano en Grecia, son un matrimonio búlgaro de etnia gitana. Sus nombres son Sacha y Atanas Roussev.
El secretario general del Ministerio del Interior búlgaro, Svetlozar Lazarov, indicó que las pruebas de ADN confirman la identidad de los padres, que han asegurado que entregaron a la niña a una familia para la que trabajaron mientras vivían en Grecia.