Vamos a una polarización entre el kirchnerismo y el antikirchnerismo. No creo que se alcance el nivel de bipolaridad y beligerancia de Venezuela.https://elcomercio.pe/tag/29812/venezuela, pero sí marchamos a una división en la sociedad en dos fuerzas contrapuestas, apunta el analista político Ricardo Rouvier tras el masivo cacerolazo registrado la noche del jueves contra el gobierno argentino.
Rouvier señala en entrevista con la agencia dpa que la protesta que tuvo este jueves su epicentro en la ciudad de Buenos Aires y se replicó en todo el país influirá en futuros comicios, en cuanto a que en las próximas elecciones hasta el 2015 (cuando serán las presidenciales) nos acompañará esta polarización.
Este año, que tendrá elecciones legislativas en octubre, se juegan aspectos muy importantes del futuro político nacional: el empoderamiento de la oposición y la necesidad de prolongación en el tiempo del kirchnerismo, o sea mantener el poder y el predominio como fuerza política.
Estos ejes ya son dominantes y lo seguirán siendo durante los dos próximos años. El kirchnerismo tiene que resolver la sucesión o reelección u otro candidato, y la oposición debe dejar de estar fragmentada.
MOVILIZACIÓN La movilización del 18A contra el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner fue lanzada desde las redes sociales y sin identificación partidaria, pero con una activa participación de dirigentes de la oposición, a diferencia de protestas precursoras. Consultado acerca de cómo impacta este fenómeno, Rouvier considera que incide en promover la unidad de la oposición para tratar de batir al kirchnerismo.
Desde hace años que la oposición buscó unificarse con resultado adverso. Inclusive cuando ganó en (las elecciones legislativas de) el 2009, no logró mantener sus alianzas. Pero crece la conciencia entre los opositores de avanzar en unificar sus voluntades, analiza el sociólogo.
La diferencia con respecto a las protestas anteriores es que estamos en un escalamiento, se ha dado un paso más en una escalera que lleva a la conformación de una fuerza política alternativa. ¿Podrá lograrse esto? Ese es el interrogante del tablero político nacional en el espacio de la oposición.
Rouvier comenta que la composición de la movilización parece ser similar a sus antecesoras del año pasado, con el agregado de la presencia de dirigencia política y dirigencia social.
Con predominio de la clase media, participaron personas de diversas edades, expresa. No se observó en forma destacada la presencia de sectores populares que fueron expresados por dirigentes, pero no por sus bases.
El principal reclamo de los manifestantes que repudiaron en las calles al gobierno se inscribe en lo institucional y no en lo socioeconómico, asevera el consultor.
Inclusive cuando se reclama por inflación, en realidad se habla del Indec (Instituto Nacional de Estadística y Censos) y la falta de credibilidad en sus mediciones. Lo institucional comprende también la corrupción, la oposición a la reforma judicial y la inseguridad, indica Rouvier.