Semanalmente, la revista BBC Focus resuelve algunas dudas de sus lectores. A continuación, una selección de sus respuestas para curiosos.

¿Por qué las auroras polares suelen ser verdes?

Las auroras boreales:https://elcomercio.pe/tag/266519/aurora-boreal y australes se generan a partir de partículas energéticas que bombardean la atmósfera. Éstas activan átomos como el oxígeno y el nitrógeno, lo que produce un maravilloso espectáculo de luces.

El color de este fenómeno depende de la molécula que participa en el proceso y de su grado de actividad, por lo que hay varias razones que explican por qué el verde es el color predominante.

En primer lugar, el cambio en el átomo de oxígeno que crea este color necesita, relativamente, poca energía para activarse cuando se le compara con otros elementos abundantes como el nitrógeno.

Adicionalmente, a la altitud a la que se forman las auroras, el oxígeno atómico es el componente más denso de la atmósfera, por lo que es más probable que se active por las partículas.

En tercer lugar, otros átomos de oxígeno que podrían producir el color rojo se apagan por colisiones que se producen entre átomos y otras partículas.

Finalmente, el ojo humano es más sensible a la luz verde, lo que explica que otros colores más sutiles pasen desapercibidos.

¿Por qué olvidamos cosas?

¿Cómo no hacerlo? Nuestros ojos realizan movimientos para registrar lo que hay alrededor unas cinco o seis veces por segundo, con lo que se recopila una cantidad inmensa de información cada vez que realizan este proceso.

Cuando eso ocurre, el sistema visual del cerebro comienza a deshacerse de la mayoría de lo observado y escoge lo que tenemos que registrar para reaccionar en función de lo que sea necesario.

Si tuviéramos que recordar todo lo que vemos cada minuto, tendríamos cientos y cientos de imágenes muy detalladas. Nuestro cerebro estaría sobrecargado y no sería capaz de entender lo que vemos.

En lo que se refiere a eventos importantes, el problema no es cuanta información se almacena, sino cómo se accede a la misma. Podemos tener recuerdos de algunos hechos, pero ser incapaces de encontrarlos rápidamente cuando los necesitamos.

También pueden olvidarse cosas a propósito, consciente o inconscientemente, cuando sencillamente no queremos recordar algún evento doloroso o desagradable. Así que puede que los recuerdos no hayan desaparecido, incluso cuando parece que se han olvidado.

¿Hubo más de un Big Bang?

Un error común es pensar que el tiempo mismo empezó con el Big Bang. No hay una razón física para suponer que es así, por lo que algunos científicos han indicado que el Universo podría ser infinitamente grande e infinitamente antiguo.

Una teoría afirma que materia y energía se reponen continuamente a través de un ciclo sin final de Big Bangs. Aunque estos postulados ofrecen pistas acerca de algunos aspectos enigmáticos en la cosmología moderna, encontrar evidencia al respecto es extremadamente difícil, si no imposible.

¿Cuál fue el primer idioma?

En la actualidad se hablan alrededor de 6.000 lenguas en el mundo. Utilizando técnicas estadísticas que permiten analizar la frecuencia con la que las palabras y los dialectos cambian, se ha calculado que habría tomado al menos 100.000 años para que un sólo idioma se hubiera modificado tanto.

Partiendo de esta consideración, habría que retroceder hasta la Edad de Piedra, al momento en el que se estima que el Homo sapiens apareció. Es posible que especies anteriores, como el Homo heidelbergensism, que vivió hace 600.000 años, o el Homo habilis, que se calcula estuvo en el planeta hace más de 2 millones de años, se comunicara con un idioma, pero la evidencia al respecto es débil.

Si el lenguaje evolucionó antes de la migración de África, que se registró hace 120.000 ó 150.000 años, es posible que todas las lenguas que existen en la actualidad hayan surgido de un mismo idioma, de la misma manera en la que todos los seres humanos tienen un mismo ancestro.

Pero incluso si esto es cierto, no hay manera de saber si antes de que esa migración se produjera, se hablaban otras lenguas que desaparecieron posteriormente.

Se han realizado varios intentos de rastrear el árbol genealógico de los idiomas actuales para encontrar gramática y vocabulario antiguo. En 1994 el lingüista Merrit Ruhlen, de la Universidad de Stanford, dijo que había varias palabras raíz que podrían haber derivado de una lengua ancestral, como ku (quien) y ma (que).

Pero este tema es controversial, y para algunos lingüistas la búsqueda de un primer idioma no tiene sentido.