El Ministerio de Defensa de Iraq anunció en una conferencia de prensa que ha logrado desmantelar una célula terrorista de Al Qaeda dedicada a la fabricación de armas químicas en Bagdad.

Este grupo se especializó en la elaboración de compuestos químicos como gases sarín, mostaza y nervioso y, según confesaron los arrestados, tenían la intención de usarlos dentro del país, contra miembros de la mayoritaria comunidad chií, y luego en ataques en ciudades de países vecinos.

En un comunicado, el ministerio precisa que el material químico fue incautado en los dos lugares donde se fabricaban, uno en Bagdad y otro en una provincia sin determinar.

Además, con cooperación de servicios de inteligencia extranjeros, se logró detener a cinco personas, después de un seguimiento de tres meses, y se incautaron aviones de juguete a control remoto, que serían utilizados para dispersar los gases.

Según las autoridades iraquíes, la célula contaba con una red de contrabando que transportaría las armas a países vecinos, América del Norte y Europa.

Iraq vive desde hace meses un repunte de la violencia de naturaleza sectaria, que solo el mes pasado segó la vida de más de un millar de personas, en el mayo más cruento en más de cinco años, según estadísticas de la ONU.