Redacción EC

Washington [AFP]. El presidente recibirá el miércoles en la Casa Blanca a su homólogo ecuatoriano, , para una reunión con un marcado tono comercial en la que participará el representante de negocios de , Robert Lighthizer, dijo este martes un alto funcionario.

“Esperamos con ansias el diálogo con Ecuador para ver cómo podemos trabajar juntos y qué se puede hacer para avanzar hacia un esperado acuerdo comercial entre ambos países”, dijo un alto cargo del gobierno de Estados Unidos bajo condición de anonimato, aclarando que en este punto no se puede esperar que haya un pacto todavía.

Ambos países viven un acercamiento desde la llegada al poder de Moreno, que fue aliado del expresidente socialista Rafael Correa (2007-2017) pero dio un portazo a varias de sus políticas, declarándose firme socio de Washington.

Antes de viajar, Moreno dijo que busca un modelo de acuerdo comercial similar al que su país tiene con la Unión Europea, que “favorezca principalmente a los productores”. “El intercambio comercial que tenemos con Europa ha mejorado ostensiblemente y ha mejorado muchísimo a la productividad y las exportaciones del Ecuador y yo creo que se puede lograr lo mismo con Estados Unidos, afirmó a la prensa.

El presidente ecuatoriano anunció que solicitará que “se bajen las tasas de algunos productos”, entre ellos el brócoli, las flores y alcachofas, e indicó que “hay que pedir a los Estados Unidos que haya mayor celeridad en la toma de decisiones”.

La cancillería de Ecuador informó que en la cita se analizarán temas bilaterales “en los ámbitos económico y comercial, de inversiones, seguridad pública, cooperación para el desarrollo, educación y cultura, lucha contra la corrupción y el narcotráfico”.

La agenda de Moreno, cuya visita concluye el 15 de febrero, incluye ne una reunión con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y con el presidente del Banco Mundial, David Malpass.

El gobierno ecuatoriano acordó un crédito con el Fondo Monetario Internacional por 4.200 millones de dólares a cambio de un fuerte recorte fiscal para reducir el déficit fiscal.