Una reunión entre funcionarios de Corea del Sur y del Norte arrancó hoy en la zona desmilitarizada que divide ambos países con el objetivo de dialogar sobre el futuro del complejo industrial de Kaesong, clausurado hace más de tres meses por deseo de Pyongyang.

El encuentro se produce en un momento en que ambas Coreas han recuperado la comunicación gracias a la reapertura de la línea telefónica que les sirve como único lazo de contacto, y que el Norte había cortado un mes antes.

De acuerdo con la propuesta inicial del Sur, la reunión abordaría principalmente el posible acceso de empresarios surcoreanos al polígono, ubicado en el Norte a escasos kilómetros de la frontera.

Esta visita les permitiría inspeccionar y llevar a cabo tareas de mantenimiento de instalaciones y equipos, o retirar productos y materiales almacenados a la intemperie que puedan deteriorarse con la llegada de la estación lluviosa a la península coreana.

LA IMPORTANCIA DE KAESONG Kaesong es uno de los temas más urgentes en la agenda bilateral, ya que el complejo permanece cerrado desde que a principios de abril Corea del Norte decidiera retirar a todos sus trabajadores en plena campaña de hostilidades lanzadas contra su vecino, EE.UU. y Japón.

Este proyecto industrial, en el que 123 empresas del Sur fabricaban productos con mano de obra barata de 53.000 obreros del Norte, es un símbolo de la etapa de entendimiento que ambas Coreas protagonizaron la pasada década.