El secretario de Estado John Kerry dijo el miércoles que aún no ha evaluado debidamente cuán viable es el nuevo gobierno de Nicolás Maduro debido a lo que calificó de irregularidades gigantescas durante los comicios presidenciales del domingo.

Obviamente hay irregularidades gigantescas, vamos a tener dudas importantes sobre la viabilidad de ese gobierno. Esa evaluación hay que hacerla y no la he hecho todavía, dijo Kerry al responder a una pregunta de la legisladora republicana Ileana Ros-Lehtinen al comparecer ante el comité de Relaciones Exteriores de la cámara baja.

No estoy seguro de que (la disputa) ha terminado. La OEA (Organización de los Estados Americanos) ha pedido un reconteo y otros también. Veamos cómo termina esto, agregó.

Kerry señaló que debido a la disputa sobre el resultado electoral no planea enviar emisario alguno al juramento que Maduro planea tomar el viernes.

UN PANORAMA INCIERTO El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza , dijo el miércoles durante una sesión del Consejo Permanente que nuestra intención desde el comienzo, (fue) asociarnos a la apertura que se manifestó en un primer momento, al señalar ambos candidatos la noche de la elección su disposición a someterse a los recuentos que fueran necesarios.

Maduro acusó la víspera a la embajada de Estados Unidos de financiar protestas y brotes de violencia que dejaron el lunes siete muertos y docenas de heridos en la nación sudamericana en rechazo a los resultados electorales del domingo, que favorecen al presidente encargado.

Las autoridades electorales anunciaron la victoria de Maduro, el heredero elegido por Hugo Chávez , por 235.000 votos o 1,59 puntos porcentuales por encima de su contrincante opositor Henrique Capriles, quien condicionó reconocer el resultado a un recuento total de los votos.

El Consejo Nacional Electoral proclamó el lunes a Maduro triunfador de la elección, un trámite legal en el que el ganador recibe un diploma.

La procuradora general venezolana informó el martes que siete personas murieron y 61 resultaron heridas durante las protestas callejeras ocurridas tras las elecciones del domingo. Maduro anunció que no permitirá marchar el miércoles a la oposición en Caracas.

Venezuela y Estados Unidos carecen de embajadores desde 2010, pero el intercambio comercial entre ambos países se ha mantenido pese a que las relaciones se han vuelto tensas desde que Chávez asumió el poder en 1999.